Prisionera De Un Magnate romance Capítulo 41

La pequeña reunión no duró mucho, esta bien que me case, pero no era para tanto tampoco, y no es que no me gustara que solo fuera una comida con mis amigos, ya que realmente esta era la boda de mis sueños, admito que una vez si llegue a imaginar que me casaba y aunque en mis sueños era otra situación, sin duda esta fue la mejor que pude haber tenido.

De seguro todo piensan que estoy loca ya que técnicamente me casé el mismo día en el que me propusieron matrimonio, pero ahora tengo una historia para contarle a mis nietos.

Justo ahora vamos a empezar a recoger el desastre que hizo Agustín, Alejandra, Rubén y Chris, ellos se pusieron super borrachos y empezaron a hacer puras babosadas.

Todos los que están sobrios están recogiendo el desorden que ocasionaron, esta bien que era para celebrar, pero este lugar debe quedar impecable para así poderlo entregar.

Todos se ven muy chistosos, cuatro borrachos dormidos en el pasto y todos los demás enojados mientras limpian, excepto yo, y no es que sea floja, solo que estoy embarazada y no puedo hacer esfuerzos.

No, la verdad si soy floja, incluso Rohan estaba limpiando, pero después se aburrió y puso a los changos a hacerlo, eso es tener dinero y poder.

Sin duda mañana será un mejor día, pues resulta que mañana les diré a todos que no solo es un bebé, sino dos y también que son, después de mucho pensarlo, decidí revelarlo, pero será una sorpresa para todos.

Ni yo se que son mis hijos, solo los miles de doctores que contrató Rohan saben, más le vale que no los sobornara para que él sepa, los mato a cada uno de ellos y después a Rohan.

Bueno el caso es que tengo preparado todo, por la mañana tengo mucho que hacer por lo que debo dormir lo más pronto posible, sino, no alcanzaré a hacer todo lo que quiero.

Tengo suerte de que Ariana no tomara ya que así me podrá ayudar aunque no quiera. Le dije que si no me ayudaba, no sería la madrina de un bebé.

Es divertido jugar con los sentimientos de Chris y Ariana, no tienen ni idea de cuanto los sobornare, ser la madrina de mis hijos les costará mucho.

En realidad no, ellos serán los padrinos de un bebé, los otros padrinos lo dejaré en manos de Rohan, pero si se le llega a ocurrir a la zorra de Adriana lo mato, tendrá la muerte más lenta y dolorosa de su vida.

Aunque seamos sinceros, él podrá hacer lo que quiera conmigo, pero nunca dejaré que perjudique el nombre de unos de mis hijos, ya es suficiente con que él estuviera con ella, no le puedo dar tantas malas noticias a mis hijos.

─Será mejor irnos ahora, no quiero que se haga más tarde y tú debes dormir ─Rohan llega por detrás y me abraza tomando mis manos.

─Discúlpame pero no, se te olvida que esta noche es nuestra luna de miel ─me volteo y le doy una sonrisa de niña buena.

─Pequeña diablilla, eso no pasará ─toma mi mano y me da la vuelta para ponerse a un lado mío y empezar a caminar.

─Eso está por verse ─empezamos a caminar hacia el auto y le entrego las llaves que nunca le di por si le daban ganas de escapar de la boda.

Me ayuda a subir al auto y enseguida sube él, realmente no pasara nada, yo estoy muy agotada, no tuve mi siesta esta tarde, y además estuve soportando mucho ruido y provocó que me doliera un poco la cabeza.

─Gracias ─Rohan voltea a verme y me mira extrañado.

─¿Cuál es el motivo de tu agradecimiento?

─Gracias por darme la mejor boda sorpresa de la vida.

─No debes agradecerme nada, al contrario gracias a ti por no matarme con un libro y huir.

─Que no lo haya hecho no quiere decir que no lo quisiera hacer, si no me hubiera sentido mal por golpearte sin querer y hacerte sangrar, lo más probable es que ahora estaría en uno de tus carísimos aviones volando al otro lado del mundo con tus millones.

─Querrás decir billones.

─Maldito presumido, pero debo admitir que escogí un buen esposo: guapo, joven y billonario, es mucho más de lo que merezco.

─Tu mereces mucho más que eso, tú mereces el mundo entero.

─Si...yo pienso diferente ─quito la vista de él y dejo que maneje, no quiero morir tan joven, además no quiero que pregunte el por qué de mi opinión.

Rohan no vuelve a decir nada en todo el camino, de hecho nadie vuelve a decir nada, y creo que eso es lo mejor.

...........

No se cuanto tiempo paso, pero ahora me encuentro en los brazos de Rohan super agotada, esta noche fue la mejor de todas.

Entramos a la habitación y él me deja en la cama con mucha delicadeza, y me da un beso casto en mis labios para después desaparecer.

Él piensa que estoy dormida, bueno en realidad si estaba dormida, pero me desperté al sentir como me tomaba en brazos del auto, admito que soy floja y no le quise decir que estaba despierta.

Pero no se a donde fue y la verdad no tengo ganas de buscarlo, lo único que quiero hacer ahora es dormir mis 16 horas al día, así que hasta la próxima.

..........

Despierto con mucha pereza como es normal en mi y me levanto de la cama para ir al baño, como todos los días.

Cuando regreso y me veo en un enorme espejo me doy cuenta de que ya no tengo el vestido de novia, ahora tengo una playera que me queda un poco grande por lo que supongo que es de Rohan, lo que significa que el cochino me desvistió y ni siquiera me aviso.

Ese cochino me las va a pagar.

Volteo a la cama para así poder gritarle pero no encuentro a nadie, la cama está vacía, acomodada no porque no soy la bella durmiente cuando duermo, soy un oso muy inquieto.

Algo extrañada y con la duda de si yo hice todo ese desastre en la cama, salgo del cuarto para ver si está por algún lado.

Lo primero que noto es que esta casa es nueva, no es la mansión donde desperté por primera vez y empezó todo, más bien es algo más pequeñp, no hay tantas habitaciones y enseguida se encuentran las escaleras.

Las bajo lento observando toda la casa, realmente es hermosa, por primera vez me gusta una de las casas a donde me lleva el idiota de mi esposo.

Una vez bajo las escaleras veo la sala y la que supongo es la puerta principal, y veo que frente a la sala hay otra puerta, una de dos, o es el baño, o es un sótano donde se comenten crímenes.

─Simplemente es la puerta de mi oficina ─Rohan aparece de la nada con una taza de café, su aspecto solo provoca que me excite, se ve extremadamente sexy.

Para que me entiendan, solo lleva un chándal sin la parte de arriba o sea solo unos pantalones, solo eso, dejando al descubierto todo lo demás y no hay que olvidar el detalle de que tiene lentes, y si no sabían, me encantan los hombres que usan lentes.

Bueno también depende de qué lentes, porque hay unos que se ven horribles.

Agradezco que tenga mucho jabón ya que así no se dará cuenta de mi presencia tan rápido, ya se que no es una gran broma, pero el lado bueno es que puedo ver su cuerpo majestuoso completamente desnudo.

Realmente él no tarda mucho en darse cuenta, pero lo más injusto es que solo se ríe y continúa bañándose.

─No se si sabia pero normalmente me baño con agua fría.

─Que loco, ¿A quién le gusta bañarse con agua fría?

Cuando Rohan abre los ojos y me ve, sonríe como idiota y luego me jala dentro del agua super helada.

─¡Maldito idiota! ─trato de salir, pero él me toma con cuidado y me pega a él─. Déjame salir.

─Yo pensé que te gustaba el agua fría.

─No puede ser, la primera vez que piensas y piensas mal, vaya esposo escogí.

─Si apenas en la noche te aplaudías por el esposo perfecto y maravilloso que tenías.

─Qué esperabas que dijera, estaba muy cansada, técnicamente dormida.

─Entonces cambiemos la opinión de mi esposa ─y así de la nada me besa y pues yo de estúpida le sigo,además para que rechazar a este hombre, debo aprovechar.

El beso que empezó como película de Disney, término como en película porno, que rayos conmigo, en mi vida he visto eso pero supongo que si es porno es por algo.

Sin poder evitarlo me empiezo a reír como loca, obvio que interrumpí un momento excelente, pero no lo pude evitar.

─¿Qué te causa tanta gracia? ─pregunta Rohan desconcertado y yo me rió aún más.

─¿Alguna... alguna vez has visto porno? ─al ver su cara, mi risa se intensifica.

─No soy el tipo que ve eso, si he llegado a ver, pero prefiero hacerlo ─lo último lo dice con una sonrisa pícara y yo le doy un manazo.

─No lo vuelvas a decir, el bebé no debe saber eso hasta los 40 años.

─Para empezar, tú preguntaste y además no creo que nos escuche.

─Claro que escuchan, la otra vez soñé con ellos y me reclamaron por acostarme contigo, me dijeron que ahora están traumados con tu amigo intimo.

─¿Soñaste con ellos? ¿Son dos bebés?

¡Mierda!

─¡¿Sorpresa?!

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