Secretos - La historia de una acompañante romance Capítulo 17

Empiezo a prepararme, me pongo una lencería erótica, me pongo una especie de cinturón en mi pierna derecha, este me permite acomodarme el látigo, y otros juguetes, me pongo el pantalón, la camisa y las botas. En el cinturón me acomodo dos pares de esposas y el garrote que ocupan los policías, también pongo una pistola está no es de juguete, solamente por complemento, empiezo a maquillarme y me hago una cola de caballo, en eso recibo un mensaje.

"Habitación D6, 10 minutos".

Me apresuró y agarró mi elemento especial, espero que esto no me ocasione problemas, me dirijo al ascensor y subo al Piso D, llegó a la habitación 6, espero que se cumplan los 10 minutos y luego golpeó la puerta.

— ¿Quien?

—Policia, un vecino ha reportado un disturbio y queremos ver qué todo esté en orden.

El abre la puerta.

—Lo siento oficial, se abran equivocado, yo acabo de llegar y estoy esperando a alguien.

—Permitame verificar, si no lo hago mis superiores me llamarán la atención, solo será unos minutos.

El se queda pensando, lo veía algo nervioso, pero me dejó pasar.

Recorro la habitación buscando alguna anomalía, en un descuido de el dejo caer una pequeña bolsa.

—Parece que todo está en orden, disculpé los inconvenientes, gracias por cooperar.

—Cuando se trata de la ley lo que sea.

Pongo mi mirada sobre la bolsa que deje caer hace unos instantes.

— ¿Que es eso?

— ¿Que cosa?

Voy directo hacia mi objetivo, lo abro.

—Esto parece ser droga, acaso usted está consumiendo drogas, póngase contra la pared le haré una revisión.

—Eso no es mío oficial, como le dije acabo de venir y mi visita no tarda en llegar.

—He encontrado esto delante de su presencia, en una habitación alquilada por usted, no me haga llamar refuerzo.

—Se arrepentirá de esto, no sabe usted quien soy yo — lo dijo mientras se pegaba a la pared.

—Se muy bien quien es usted.

Vine y le esposa las manos, empecé a requisarlo, comencé por las brazos me movía lentamente, luego pase por su pecho, cuando estuve revisando su pecho me pegue bastante para que él pudiera sentir los míos y al darme la espalda me hacía como que no llegaba a cubrir todo su pecho.

—Al parecer todo está en orden por aquí, ahora iremos más para abajo.

Empiezo por las partes externas de su piernas y luego paso al interior, empiezo a subir lentamente hasta estar a pocos centímetros de su entrepierna.

—Debo de revisarlo todo, para asegurarme que no guarde nada.

De esa forma llegó hasta su miembro que ya se encontraba duro.

—Que tenemos por acá, parece que es otro paquete.

—Eso no es lo que usted cree.

—Yo soy la que determina eso.

Lo pongo de frente, desabrochó el pantalón, le bajó la cremallera y empiezo. bajar el pantalón, tocó por encima de su boxer.

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