Secretos - La historia de una acompañante romance Capítulo 22

Después de lo acontecido, fui a nadar en la piscina, ya no importaba como anduviera, pero Azucena desapareció de mi vista, estuve nadando buen rato y luego tome un poco el sol, mire el reloj y faltaban 10 minutos para las 11:30, en eso ella aparece.

—Ya está todo listo con el Jacuzzi, tienes 30 minutos, luego saldrás para comer, la masajista viene a las 3 de la tarde, me han llamado de la corporación e informaron que tú cliente de mañana vendrá aquí.

— ¿Aquí?

—Son clientes con dinero, pero sin un estatus social, entonces no les importa dónde vayan a está con tar de lograr su acometido, el reservó la noche, así que tendrás todo el día de mañana para ti también.

—Entiendo ¿Dónde queda el Jacuzzi?

—Se encuentra al final del pasillo, eso sí, nada de travesuras ahí, es dolor de huevo limpiar eso cuando se llena de fluidos.

—Tranquila, ahorita solo quiero relajarme.

Voy hacia donde ella me dijo, el agua estaba a una temperatura agradable, fui entrando poco a poco para acostumbrarme hasta que ya estuve totalmente adentro, es tan agradable estar aquí adentro, sentir como sale el agua, los chorros de presión que rico.

El tiempo pasó tan deprisa que en un abrir y cerrar de ojos Azucena me fue a hablar.

—Ya es tiempo de salir.

—Esta bien ya voy.

—El almuerzo ya está listo.

—Te agradezco, me ir a poner algo de ropa y llegó.

A pesar que era agradable andar desnuda, tampoco podia andar todo el tiempo así, si venía algún cliente podría verme y no quiero eso.

Me puse mi camisón y un calzón, cuando llegué estaban los dos platos servidos.

— ¿Que haces cuando no hay clientes o chicas?

—Descansar, aquí he encontrado paz, a pesar que en la corporación te tratan como mercancía, al final si sigues sus reglas sales ganando, es cierto es muy duro saber que te están vendiendo, los primeros meses fueron muy doloroso para mí, me rehusaba a aceptar la realidad y sufrí, a los seis meses tuve a mi primer cliente y sentía que era su muñeca de como me agarró y lo peor es que no dejo propina.

— ¿Que edad tenías cuando llegaste?

—15 años recién cumplidos, a muchos hombres les da morbo estar con una menor de edad.

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