Estando en la cama ya intenté dormir y por más que lo intentaba y lo quería no podía, todos los pensamientos me aturdían y evitaba que yo pudiera descansar, di mil vueltas en la cama, hasta que alrededor de las 3:00am me quede dormida, pero el sueño no duró mucho, me levante a las 5:30am.
Notando que ya no podía dormir, decidí darme una ducha, al salir, vi mi móvil, tenía 40 llamadas perdidas de mamá 30 de papá y 64 de Drake e incluso de número desconocidos y mensajes de Agnes.
Al parecer Drake ya les había dicho que me había ido, ignoré las llamadas y procedí a cambiarme de ropa.
Un Jean y una blusa blanca, algo sencillo.
Cepillado mi cabello, mi móvil sonó, era una llamada. Vi la pantalla Drake salía.
Atendí la llamada.
-... Dime - dije, cerré mis ojos.
- ¡Helka! - grito de felicidad, su voz estaba ronca - Por fin,.... ¡Helka!...
- Si aquí estoy... - mi respiración se fue tornando lenta -... ¿Por qué me llamabas?.
- ¡Que no es obvio! Te he estado llamando desde hace horas... Helka te extraño - dijo, su voz tembló.
- Drake yo también - dije rompiendo en llanto.
- ¿Dónde estás? - preguntó esperanzado en qué le diría.
- Pero no nos podemos ver - adelante.
- ¿Que? No, necesito verte - dijo frustrado.
- Necesito estar a solas, estoy avergonzada - tapé mi boca con mi mano.
- ¿Por lo que te pasó?... Helka, no te dejaré sola, necesitas decirme dónde estás - cerré mis ojos, pero las lágrimas seguían cayendo.
- Estoy bien, Drake - tome aire antes de seguir.
- Pero quiero estar contigo y tú conmigo.
- Lo sé, Drake, pero entiéndeme.
- Te entiendo,... Por eso quiero que estés conmigo, necesitas estar bajo mi cuidado.
- ¿Ahora soy una pequeña que necesita de tu protección? - pregunté bromeando mientras me secaba las lágrimas.
- Así como tu me cuidaste en el hospital,... Te la debo - su voz fue susurrando.
- Te llamo más tarde.
- Helka por favor - rogó.
- Te mando la dirección antes de que cometa una locura - reí.
- No te demores - dijo... - Amor - colgué a los pocos segundos que dijo Amor.
Y esa última palabra, me hizo pensar, que si era posible volver a amar y ser amada después del terrible pasado, después de pasar días torturándome y metiéndome psicología por el trauma de aquel horrible e inolvidable día, pero eso ya pasó, lo que tenía que hacer es buscar ayuda, hablando con la verdad, no ocultándolo más. Y ahora más que nunca, necesitaba a Drake.
Escucho la puerta tocar. Por el desvelo de anoche, me quedé dormida en segundos.
Corro hacia la puerta, la abro de golpe y veo a Drake, no aguante mas y lo abracé, correspondió el abrazo, sus manos tocaron mi espaldas con necesidad.
- No te vuelvas a ir - todas mis ganas de llorar se acumularon, la voz no me salía.
- Quiero que me ayudes - logré decir entre sollozos.
- Yo estaré aquí para ti Helka, nunca lo olvides - besó mi cabello.
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