Un contrato de amor romance Capítulo 41

- Mañana al amanecer hablamos bien - dije acomodándole un cabello a Agnes.

- Si, me daré una ducha, espera a Hugo, ¿Le avisas que venga rápido? - asentí.

- Agnes, tu no me ocultarías nada, ¿Verdad? - no podía descifrar su cara, la note más cansada que nada.

- Claro que no - medio sonrió.

- Iré a por Hugo, adiós - besé su frente, luego ella la mía.

- Descansa, estaré en la habitación de enfrente.

- Descansa - salí de habitación.

Volví abajo.

Sigilosa, bajé las escaleras, escuché las voces susurrantes de Hugo y Drake.

- Con suerte logramos escapar, Agnes no quiero que esté relacionada. Me importa mucho como para que este en este mundo.

Mi corazón latió fuerte de nervios.

- Ni Helka, pero notando su curiosidad, querrá saber más, creerá que le soy infiel.

Mi corazón palpito más calmado y con ello sentí un sentimiento de paz de cierta manera.

- Agnes sospecha, ya me preguntó sin rodeos si estamos relacionados con esto.

- Mm, bien, Helka no, pero sé que sospecha...

- Bien, mi tío nos ayudará, dije que ya no quería...

Me hice notar con un carraspeo.

Nerviosa sin querer preguntar algo indebido.

- Hugo, Agnes te espera en su habitación quiere estar contigo.

- Bien, vamos - dijo Hugo después de segundos.

Me fuí de primera, dudé en seguir escuchando si seguían hablando, pero no me arriesgaría.

Al acostarme en la cama, analiza.

Estaba agradecida de que Drake no fuera infiel, pero las palabras de Hugo "Este mundo". Eran muy consecutivas en mi cerebro.

- Helka - me enrollé en una parte de la cama, dejando un gran espacio para el.

Quitó sus pantalones de dormir, se quedo en bóxer. No le mire, cerré mis ojos intentando ya descansar.

- Lo siento, me sentía muy incomodo dormir así, me he acostumbrado a dormir solo en bóxer.

- Pues teniendo visitas, se me hace muy indebido.

- Pero estoy durmiendo contigo, no con ellos.

- Están enfrente de la habitación. ¿Y si nos quieren asaltar a todos por estar en ese mundo? - hice comillas en el aire por repetir las palabras de Hugo.

Drake se quedó en un incomodo silencio. Lo dicho por mi hizo que su actitud cambiara. Lo vi de reojo, se puso unos short cortos de pijama.

Se acostó a mi lado.

- Descansa Helka.

- Igual, Drake - sentí que al decir su nombre lo dije como un reproche, más no gentilmente.

Oí un suspiro de cansancio de su parte.

- Helka.

- Buenas noches, Drake, tengo que levantarme a las 7am, descansa igual.

- Bien - sentí sus labios en mi cuello.

Cerré mis ojos, el se alejó.

Hasta que ambos nos dormimos.

Cuando desperté, el sol no había salido, vi la hora, tan solo habían pasado 2 horas y media desde que me dormí.

Me levante y entré a la ducha.

Medité, era el único lugar que podía pensar claramente, mientras me estrenaba el cabello.

Recordé parte del sueño, a los hombres, y el papel con mi nombre.

Debo estar delirando para soñar eso... Borré por completo el sueño de mis pensamientos.

Al salir del baño, me envolví en una toalla, Drake seguía durmiendo plácidamente, intente no despertarlo mientras me vestía.

Me coloqué unos vaqueros y una blusa roja de tiras, encima una chaqueta de cuero negra y un par de zapatos negros.

Metí mis cuadernos a la mochila, me posé en la puerta, decidiéndome si lo despierto o no.

Me acerqué a Drake y solo besé su mejilla.

Se movió un poco, oí un gemido de parte de él.

- Mmm, ¿Helka?.

- Lo siento, no quería despertarte.

Con sus ojos achinados, se sentó en la cama, se restregó los ojos.

- No importa, ¿Ya te vas?.

- No, estaré abajo hasta que se haga hora de irme.

- Yo te llevo.

- No, mejor sigue durmiendo.

- No, hoy tengo muchas cosas que hacer en la empresa, es mejor que ya me cambie.

- Bien, te espero abajo - besé sus labios sin reproche.

- Bien.

Salí de la habitación, decidí espiar a Agnes y Hugo.

- ¿Agnes?.

- ¿Helka? Lo siento, ¿Te desperté?.

Negué - No, ya me voy a la U., ¿No vas?.

- No, estoy estropeada, bajé a por un vaso de agua.

- Oh, bien, ¿Cómo te sientes?.

- Creo que mejor, pero nos quedaremos en tu casa por un corto tiempo.

¿Mi casa?.

- La de Drake, no lo olvides.

- Ya es tu casa, se van a casar, ¿no?.

- Amm, eso creo - sonreí a medias.

- ¿Como que crees? - se rio susurrando.

- Ve a dormir, ya bajaré, adiós - y sin falta besa mi frente - ten mucho cuidado.

Asentí con la cabeza - Adiós.

Nos quedamos mirándonos en silencio.

- Ven, se que quieres un abrazo.

Si, era verdad, todo esto que me esta pasando me esta agobiando, y solo necesito un abrazo de esos que expresan que todo estará bien.

- Te extrañé mucho - dije suspirando.

- Sabes que yo también - acaricia mi cabello.

A pesar que yo fuera mayor que ella, ella era la mamá, y yo la hija necesitada de protección.

-Bien, ve, Hugo ya ha de estar por despertar y necesita ver a su mujer con él.

- Bien, adiós.

Me alejé de ella perdiéndome en el gran pasillo, bajé las escaleras y me quedé en la sala. Me recosté en el mueble, quedé observando unas fotos, me acerqué a ellas con curiosidad.

Había un hombre y Drake, abrazados de lado, sonriendo a la foto en otras estaba con Hugo, los padres de Drake.

Habían muchas fotos, y observé una por una, habían unos CD, grabaciones de audio, y cámaras de fotos, luego unas fotos sueltas.

Había un bebé, seguramente Drake, habían varias fotos de él vestido como un niño de antes, luego unas de Halloween, disfrazado de zombie, en navidad, reí al ver que en una estaba con un hombre disfrazado de Santa Claus.

Ya había pasado varios minutos, seguía entretenida con las fotos, hasta que encontré una de una mujer un hombre y una bebé, me detuve al observar que en el suelo se veía la mitad de una canasta, parecida a la del sueño, giré la foto a ver si veía firma o fecha, había un escrito, pero estaba rayado, no veía bien lo que decía, volteo la foto, el hombre era alto con barba, al fondo se veían aviones, la cara de la pareja era seria, sin expresión alguna, habían cajas también, la señora cargaba a la bebe mostrando parte del rostro.

La foto se veía muy vieja, volteo la foto una vez más intentando buscar algo y no sabia que era.

Una mano quito la foto de mis manos.

- ¿Que hacías? - guardó la foto en su saco.

- Ah, yo - no estaba segura si contarle o no.

- Solo eran unos amigos de mis padres, ellos me pidieron guardar esta foto.

- Ah, si, lo siento - junté mis manos en mi barriga.

- No importa, ¿Esta aclarado?.

- Si - no, mentí.

- Bien, ¿Vamos? - asentí.

Agarré mi mochila, la colgué en mi hombro derecho, Drake se posó detrás mío. Caminé hasta la puerta, salí.

- Espérame aquí, voy por el carro.

Apreté mis labios.

Se detuvo a espaldas mía, volteo.

- ¿Seguro que me crees?.

- Si, Drake, solo ve por el carro.

Asintió, puso sus manos en su cintura, queriendo saber si le creía, pues la respuesta era no, pero el no debía saberla, quiso hablar pero se detuvo.

Se dió la vuelta y fue a por el carro.

Volteo al mirar el lugar de las fotos. Solo debí ser mas cuidadosa al husmear aquellas fotos.

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