Un contrato de amor romance Capítulo 81

Indagué por Internet sin que Drake se dieran cuenta, el preparaba el desayuno.

- ¿Podrías venir a ayudarme? - pregunta el dándose la vuelta con una cuchara grande.

- Creo que me gusta verte cocinar - dije mientras abría otra página en la laptop.

- Ni siquiera me estas mirando - alzo la vista, me atrapó. Recién me doy cuenta que mostraba su cuerpo culturista, de la cintura hacia arriba estaba desnudo, de la cintura para abajo era pura tentación en pijama.

Incliné la pantalla hacia adelante, no la cerré.

- Estoy hablando con Agnes - mentí.

- ¿Por qué no lo haces en tu celular? - volví a alzar la pantalla después que Drake se giró para revolver los huevos con chicharrón y vegetales picados en la sartén.

- Porque está bajo de batería.

Introduje el nombre de Drake en el buscador.

Apareció mucha información, y puede que aquí encuentre algo.

Presionó una página de revista importante. Se abre una página donde está la casi biografía de Drake.

Leo y leo, Drake se ha quedado callado cocinando.

Drake Benedict, el mayor de los herederos.

Decía su fecha de nacimiento y lugar.

¿Cómo ellos saben esto?.

"Recientemente se le ha visto con una chica, ella es Alicia Forbs, una modelo de 22 años, se les ha visto ya en varios lugares públicos demostrandose amor"

A continuación, varias fotos de ellos en cámaras ocultas, paparazzis, deslumbraron mis ojos.

Alicia es hermosa de cabello rubio y ojos turquesa, ya veo porque Drake se enamoró de ella, en parte, claro. Alicia es delgada, usaba ropa que yo tendría que comprar durante dos años sin gastar el dinero en más.

Es super hermosa.

Pensé, pero, ¿Cómo ella se volvería mala?, no me cabe lo que Drake dijo, que ella no quería a su propia hija, en algunas fotos se les veía sonriendo e incluso ella dándole de comer en la boca a Drake como a un niño chiquito.

Seguí indagando. Hasta que Drake me obligó indirectamente a cerrar más paginas y la lapto.

El no se debía enterar de lo que yo estaba haciendo. Así que elimine el historial, al hacerlo, me di cuenta que Drake también lo hacía, algunas veces entró a internet, pero no sale ninguna página buscada. Eso era muy sospechoso.

Dejé a un lado mi investigación secreta y desayunamos en paz.

Con cada mordida a la comida, me veían las imágenes de Drake y Alicia besándose...

- ¿Te gustó? - me pregunta mientras me limpio la boca con la servilleta.

Besé sus labios mientas recogía los platos - Estuvo de maravilla corazón.

Los llevé al enjugadero para lavarlos y dejar secarlos.

Siento las manos de Drake recorrer mi cintura hacia adelante.

- Te espero en la playa... - besa mi cuello - te pones lo que te deje en la cama - veo como se aleja con su pantaloneta nueva y zapatilla, su camisa colgando en su hombro, veo como las marcas de mis uñas aun yacen en su espalda.

Sonrío por lo bajo.

Fui a la habitación, donde vi una caja.

Más cajas.

La abro de inmediato, hay un vestido turquesa con las mangas de los brazos en forma de campana y zapatilla blancas con plataforma.

Sonreí por el detalle.

Tan rápido me lo puse, salí con Drake. El estaba sentado en frente del mar.

Me senté junto a él.

- Me gusta,... Amo estar contigo - dice.

- Se siente tan bien - completo.

Me recuesto a su lado.

-... - abre su boca pero enseguida la cierra - Aisha... - quiere decir algo pero se detiene.

- ¿Aisha? - pregunté.

Sentí que algo malo estaba pasando con ella. Me comenzaba a preocupar.

- Esta aquí - dice la voz detrás mío.

Me giro de inmediato.

Veo como Drake sonríe.

- ¿Aisha? - me levanto y la abrazo enseguida.

Drake se levanta.

- ¿Hace cuánto estas aquí?

- Llegué hace un día... Me enteré que sus vacaciones fueron aquí así que pasé de visita.

- ¿Dónde te quedas?

- En una residencia con unos amigos... Estamos de paseo, los que fuimos de la universidad.

- ¿Por qué te fuiste en primer lugar? - pregunte recordando el resentimiento.

- Tuve que hacerlo, odio las despedidas, son muy emotivas para mi... No son lo mío... Pero díganme, además que cumplí con mi misión ¿Qué tal esa luna de miel?

- Todo de... Maravilla - observó a Drake.

- Tengo que hablarte de algo hermana - ¿Le contará?, fui la causa de que Drake ahora le vaya a decir a su familia, ¿Debería sentirme mal por eso?.

Drake me agarra la mano y lleva a Aisha dentro de la casa.

- Por cierto, te queda hermoso ese vestido - me susurra al entrar a casa.

- Sabes lo que me queda a la perfección - digo rozando mis labios con su oreja.

Entramos dejando las sandalias fuera por la arena.

- Y bien.

Plop.

Así sonó nuestra burbuja seductora cuando Aisha habló.

- ¿Recuerdas a Alicia? - si que le iba a decir.

- Drake, ¿Estás seguro? - el asintió.

- La perra esa.

- Pues tuve una hija... con la perra esa - dijo cruzándose de brazos.

Aisha se queda perpleja por lo dicho.

- ¿Estás de broma? - Aisha quiso caminar a nosotros pero se detuvo. Envolvió sus manos.

- No - le dije - yo también me entero hace poco.

- ¿Dónde esta? - pregunta a Drake ignorandome.

- Ese es el problema.

- ¿Se la llevó ella?, ¿No te la quiere dar?.

- Alguien la secuestró - metió sus manos a sus bolsillos.

- ¿Y tu aquí? ¿De luna de miel?

- Busco desde aquí, investigo desde aquí - el historial, recordé.

- Ellos la pueden tener en otro lugar y tu aquí tranquilo... - sentía que se estaba saliendo de control.

- Claro que no, enserio, Hugo me está ayudando, yo hago lo que puedo, nadie sabia de la existencia de mi hija.

- ¿Desde cuándo? - pregunta Aisha cruzada de brazos algo irritada.

- Hace casi cuatro años - dice calmado.

Se dejó caer al mueble.

No sabía que hacer o que decir.

- ¿Nadie sabía nada? - vuelve a preguntar Aisha - ¿Nada de nada? ¿Nuestros padres? 

- No - dice Drake en un susurro.

- Lo siento - Aisha se arrodilla frente a él.

- Fue mi culpa.

- ¿Dónde la dejabas todo este tiempo?

- Con nana Mery...

- Ellos sabían su ubicación... - piensa por un momento - ¿Sabes quiénes eran?, ¿No te dijo si les vió algo con lo que podemos buscar.

- Un tatuaje de alacrán o escorpión, algo así - abrí mis ojos demasiado, estoy segura que comienzo a odiar los Tatuajes y los escorpiones.

- Qué demonios - estoy tan segura que era mi padre.

Ahora entiendo a que se refería mi papá biológico al decir "volverás" maldita sea que tenga suerte esta vez.

- ¿Qué pasó?...

- Yo... Nada, olvidé hacer algo - Corrí hasta mi habitación.

Hice la llamada una vez estando sola.

Había visto un número en mi celular desde el día de mi secuestro, no le dí importancia, pero, no se si llamarlo suerte, puede que sea un número relacionado con mi padre biológico. 

La llamada fue abierta - Quiero hablar con mi padre - dije decidida.

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