Shannon le contó que Fabian, delante de todos, cuestionó a Vivían por qué no aclaró que le habían tendido una trampa hace años. Ashley sabía que Shannon decía todo esto con la esperanza de que le diera una lección a Vivían. Sin embargo, Shannon no esperaba que Ashley se pusiera blanca como una sábana.
«¿Fabian sabía que a Vivían le habían tendido una trampa en el incidente de hace dos años? ¿Significa que está tratando de reavivar su amor por ella? ¿Se ha enterado de lo que he hecho?»
En un momento de pánico, Ashley no pudo prestarle atención a Shannon, sino que corrió a la casa de Fabian mientras lo llamaba múltiples veces. No se atrevió a plantear el asunto a Fabian, sino que tanteó el terreno. Sorprendido por su repentina pregunta, Fabian hizo una pausa momentánea antes de responder:
—Ashley, ¿qué demonios está pasando?
Su evasión para responder a la pregunta la hizo temblar más. En un intento por ocultárselo, lo soltó y forzó una sonrisa.
-Estoy bien... Tenía un poco de miedo, ya que se acerca la fecha de nuestra boda.
Esa frase le recordó a Fabian que se casaban el mes que viene. De repente, sintió una sensación de resistencia. Su silencio solo hizo que Ashley se pusiera más frenética. Le miró y le preguntó:
-Fabian, tú... no estarás pensando en cancelar nuestra boda, ¿verdad?
Saliendo de su aturdimiento, Fabian sonrió y le aseguró:
—Ashley, estás pensando demasiado. No lo haré. Mira, tienes los brazos y las piernas muy fríos. ¿Por qué no te duchas primero?
La empujó al baño mientras hablaba. Ashley entró en el baño y se dejó caer en el asiento del inodoro.
«Estoy condenada. Fabian está empezando a dudar de mí después de descubrir lo que le pasó a Vivían. ¿Qué otros trucos podría usar todavía contra Vivían?»
En medio de sus pensamientos, sonó su teléfono. Mirando la pantalla del teléfono, se sorprendió.
Esto frustró aún más a Fabian. Al pensar en las fotografías, recordó que ha guardado varias fotos de Vivían en su teléfono. Ver esas fotos ahora solo le haría doler el corazón, así que sacó al instante su teléfono para borrarlas. Sin embargo, después de borrar algunas, se dio cuenta de algo.
«Espera un momento. Estas fotos... ¿Por qué parecen diferentes a las mostradas en la fiesta de la familia Norton?»
Aunque no intentaba recordar todo lo relacionado con
Vivían a propósito, todo lo relacionado con ella estaba, de
alguna manera, grabado en su mente. Incluso podía recordar las fotos de la fiesta. La mayoría de las fotos eran las mismas que las de su teléfono, pero una de ellas era diferente: en ella Vivían estaba tumbada sobre una almohada con el pelo extendido. De repente, Fabian se quedó sin aliento.
«Por qué... Ashley dijo que las fotos eran de mi teléfono. Sin embargo, ¿por qué tenía una foto más en la pantalla que no se encuentra en mi teléfono?»
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