ACEPTO EL TRATO.
―¿Estás bromeando, verdad?
―Mis motivos no son los que piensas. Únicamente quiero darte una salida, Aylin. Una oportunidad, la oportunidad de demostrar tu inocencia.
Ella guardó silencio y trato de analizar sus razones, estaba clara de que él era su pareja destinada, pero, de lo que no estaba segura, era de que si ella era la de él. Aunque por lo que acababa de pasar, podría decirse que sí, o únicamente era simple atracción sexual.
―Imagino que todavía no has encontrado a tu alma gemela, ¿Por qué no te unes con alguien más? ¿Por qué yo? No es como si te resultara difícil encontrarla, eres atractivo y viril, las lobas de esta manada harías filas por ti.
―Mi compañera está muerta ―Cassian dijo con los labios apretados ―Murió hace cinco años.
Esto fue una gran sorpresa para ella, sin embargo, no ahondo en el tema.
―Lo siento, debió ser un gran golpe. No nos recuperamos del todo cuando perdemos a alguien a quien queremos.
―Tienes razón ―él continuó mirándola ―Te elegí a ti, porque sé que no te vas a hacer ilusiones.
―¿Perdón? ―dijo frunciendo sus bonitas cejas ―¿A qué te refieres?
―No busco el amor, Aylin. Lo único que quiero es continuar con el legado de mi hermano y para asumir el trono necesito una compañera ―él hizo una pausa y suspiro ―Estaremos unidos por el plazo de un año, únicamente pasaremos por la ceremonia de apareamiento, luego… ―sus manos se apretaron y lucho contra los instintos de su lobo ―… luego no volverá a suceder. Podemos llevarnos bien.
―Insisto, debes estar loco.
―No, únicamente hago lo que creo correcto, a pesar de que todos te señalan, yo creo en tu inocencia y te estoy dando la oportunidad de que limpies tu nombre. Cumplido el paso de un año, te dejaré libre, podrás quedarte en esta manada o irte, no hace nada para detenerte.
De alguna manera sus palabras le dolían, estaba rechazándola con educación. No obstante, ella no iba a dejarle ver su vulnerabilidad. Así que fingió una sonrisa que no sentía, pero que hizo estragos dentro de Cassian.
―¿Unión falsa? ¿Así que planeas mentirle al consejo?
―Ya te di mis razones…
―¿Vas a marcarme? Porque si lo haces nuestra conexión será profunda y ambos sufriremos con la separación, no tengo intenciones de sufrir por nadie más y menos mi loba. ―sus palabras fueron duras.
―No voy a marcarte, puedes estar tranquila. Nos aparearemos y ya. Te prometo que será simple y sin sentimientos de por medio.
Aylin estaba pensándolo seriamente, quizás era una señal de la diosa que había finalmente escuchado sus súplicas, esta era su oportunidad de salvar a su padre. Lo que llevo a la siguiente pregunta.
―¿Qué pasará con mi padre? ¿Seguirá del otro lado del bosque, en las peligrosas fronteras?
Cassian cerró los ojos, buscando la manera de manejarlo, empezaba a descubrir que su futura compañera no era fácil, que poseía carácter y no era nada tonta.
―Aylin… no puedo pasar…
―Vas a ser el alfa de esta manada, no estás obligado a seguir al pie de la letra lo que dice el consejo. ―dio un paso hacia él y su aroma inundo las fosas nasales de Cassian ―No te estoy pidiendo que lo liberes, lo único que quiero es que lo traigas aquí, así al menos podré verlo.
―Aylin.
―No me vengas con que no puedes, ¿te das cuenta de que estás engañándolos con una boda falsa? ¿Y me dices que no puedes pasar por encima de ellos y traer a mi padre? Es muy hipócrita de tu parte.
Cassian pudo oler su rabia y a la vez su excitación. Sus latidos se acrecentaron y se dijo que tenía que salir de allí antes de que cometiera una locura.
―Está bien, si eso quieres como condición, lo haré. Después de nuestra unión, lo traeré de vuelta.
Los labios de Aylin se alzaron en una sonrisa y sus ojos brillaron emocionados. Retrocedió unos pasos y asintió.
«No quiere una pareja, quiere decir que ¿planea tener una vida sexual libre? Cuando la deje ir estará con quien desee y yo…»
«Va a ser demasiado tarde para evitarlo» su lobo respondió por él.
Imaginar esto lo enfado a tal punto que tuvo que imaginar un frondoso bosque para clamarse.
―Si ya no tienes nada más que decir ―ella señaló la puerta ―Niko y yo queremos descansar, ven a buscarme cuando tenga que decir toda esa m****a de que te quiero.
Luego se dio la vuelta con el cachorro en sus brazos y se sentó en la cama, ignorándolo completamente. Cassian, la miro un segundo, antes de caminar hacia la puerta y salir, Aylin no se perdió el fuerte portazo.
Miro a su nuevo amigo y susurro.
―Vamos a salir bien de esto, Niko. Te lo prometo.
Los pasos de Cassian eran rápidos mientras volvía al estudio, en ese preciso momento tenía ganas de destruirlo todo. Odiaba a la diosa por ponerlo en esta situación, odiaba a su hermano por haberlo llamado, pero, sobre todo, odiaba a Aylin por ser la causante de estos sentimientos en él. Durante cinco años había estado tranquilo, su corazón se había mantenido en calma, pero nada más fue conocerla para que su mundo se volviera patas arriba.
Se dejó caer en la silla y echo la cabeza hacia atrás con los ojos cerrados. Y si intento calmarse no pudo, porque su mente seguía rebobinando lo que paso hace un momento, la dulzura de sus labios, la suavidad de su piel, la redondez de sus senos, el olor de su excitación.
―¡Joder! ―exclamo al momento que abría los ojos y miraba su entrepierna, su polla dolía y latía de necesidad, y en el fondo sabía que no quería a cualquier hembra, la quería a ella.
«Aylin…» susurro su lobo.
El cuerpo de Cassian temblaba, su sangre hervía dentro de sus venas, su boca salivaba por probar la dulzura de su coño. Se llevó la mano al cierre de su pantalón y lo bajo, saco su polla y comenzó a masajearla de arriba abajo, cerro los ojos y se la imagino, desnuda, encima de él, montándolo mientras sus senos se bamboleaban, llevándolo a la locura.
―Aylin… ―gimió, y aumento la fuerza de su mano ― ¡Joder, Aylin, sí!
Cassian se vino con fuerza y una pequeña sensación de saciedad lo inundo, sin embargo, su deseo por ella, no mermo ni un poco.
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