"Ramiro, ¿qué rayos estás planeando?" Elia estaba llena de pánico, observándolo con cautela.
Ramiro levantó los ojos melancólicos, fijando su mirada en una Elia visiblemente alterada y, con una voz sombría, dijo: "Cuando menciono a Sergio, ya no tienes ninguna reacción, parece que lo has olvidado por completo."
Elia, con una mirada llena de recelo y tensión en todo su cuerpo, se enfrentó a Ramiro diciendo: "Ni tú ni yo tenemos el derecho de mencionar a Sergio. Además, ya han pasado tres años desde que se fue de este mundo, ¿no es mejor dejarlo descansar en paz? ¿Por qué insistir en revivir el pasado?"
Elia no quería traer a colación el pasado porque, sin importar quien tuviera la razón, todo había perdido significado. Sergio ya no estaba en este mundo, y hablar de esos asuntos no le haría ningún bien.
"Así que para ti Sergio ya es cosa del pasado, ¿ni siquiera vale la pena mencionarlo?" Los ojos de Ramiro se llenaron de tristeza. Aunque sus palabras no eran duras, su mirada claramente cuestionaba las intenciones de Elia.
"Ramiro, ¿acaso no sabes realmente la causa de la muerte de Sergio?" Elia prefería no mencionar a Sergio; los muertos deben descansar en paz.
Pero parecía que Ramiro no podía superar el obstáculo que representaba Sergio, y ella realmente dudaba de si él conocía la verdadera causa de su muerte.e2
"¿A qué te refieres?" La mirada de Ramiro de repente se volvió aguda, clavando sus ojos en ella.
"Antes me dijiste que Sergio fue llevado a la muerte por Asier, que se sacrificó por mi libertad, retando a Asier a matarlo para que sintiera culpa y me dejara ir. Yo también lo creí así, y pensé que todo era culpa de Asier. Pero hace poco descubrí que siempre hemos malinterpretado a Asier."
Elia estaba lista para contarle la verdad.
Para evitar que siguiera atrapado en el remordimiento por la muerte de Sergio.
Después de una pausa, continuó: "Si alguien más me lo hubiera dicho, tampoco lo hubiera creído, pensaría que están tratando de limpiar el nombre de Asier. Pero estas palabras, ¡vinieron directamente de los padres de Sergio!"
Primero estableció el contexto, y luego relató los hechos: "Ese día en el hospital, escuché con mis propios oídos a Pascual y Natalia decir que Sergio, en su intento de incriminar a Asier y sacarlo de la presidencia del Grupo Griera, había añadido fósforo blanco a los teléfonos móviles, que una vez entraban en contacto con el aire podrían explotar, causando la muerte de dos trabajadores. Después de la muerte de los trabajadores, aún planeaba que Asier cargara con la culpa. Al final, fue Asier quien reveló la verdad. Sergio, incapaz de soportar el peso de su crimen, se lanzó desde lo alto de un edificio. Y Natalia, para proteger la reputación de Sergio, le rogó a Asier que guardara silencio y no revelara lo que Sergio había hecho, permitiendo que el Grupo Griera asumiera toda la responsabilidad del accidente."
Ramiro estaba incrédulo y reacio a aceptar la verdad.
Con una expresión de sorpresa y dolor, exclamó: "¡Estás mintiendo, estás tratando de difamar a Sergio para poder estar con Asier sin remordimientos!"
¿Cómo podría Sergio, en su afán de incriminar a Asier, ser tan indiferente a la vida de los trabajadores? ¡Imposible! Pensó Ramiro al escuchar las palabras de Elia.
Comentarios
Los comentarios de los lectores sobre la novela: ¡Domestícame! Mi pequeña y gran Elia
excelente cada capítulo es mejor amo esta historia...
suban mas capitulos por favor es excelente la historia...
Suban más por favor 🙏🏼 muy buena historia 💝...
Suban más capítulos 🙏🏼...