‘O tal vez llegué en el momento perfecto', continuó con una pizca de diversión.
Los ojos de Amaris se abrieron de par en par. Había reconocido aquella voz. De todos los momentos en que podría haber llegado, Alfa Nocturne eligió ahora.
‘¡No sé quién d*monios te crees que eres, pero esto no tiene nada que ver contigo, así que apártate!’, gruñó Fernando mientras se daba la vuelta lentamente.
Amaris oyó un chillido de excitación y, al mirar a Minerva, se dio cuenta de que tenía una expresión de horror mientras miraba expectante a los dos hombres que tenía delante.
Deseó que el suelo se la tragara entera mientras se giraba con morboso interés para ver cómo acababa todo aquello.
Dave se mantuvo firme, mirando impasible la figura temblorosa de Fernando que se volvía hacia él. Una sonrisa irónica se dibujó en su rostro cuando este lo miró fijamente y se quedó inmóvil.
‘Qué... esto no tiene nada que ver contigo Alfa Nocturne. Es simplemente una riña entre dos compañeros, eso es todo. No es nada serio’, Dijo Fernando, con un temblor en la voz que delataba su nerviosismo.
Minerva se rio.
‘No mientas, Fernando. Amaris te rechazó, por meterle el p*ne a su hermana y dejarla embarazada', comentó con una sonrisa y sus ojos brillando con maldad.
Fernando gruñó en dirección a ella cuando Dave adoptó una expresión pensativa y se metió las manos en los bolsillos. Ladeó la cabeza, recorrió con la mirada el aspecto desaliñado de Fernando y soltó una sonora carcajada, sacudiendo la cabeza con tristeza.
‘¿Es así como se comportan los jóvenes Alfa en estos días?’, cuestionó con una ceja levantada. ‘Es una pena... los estándares realmente han caído desde la última vez que visité otras manadas’.
Minerva aplaudió entusiasmada y Amaris sintió una punzada de lástima por Fernando.
'No te atrevas, Amaris...', siseó Maena.
'Lo rechacé, Maena... no necesita que lo pateen cuando ya está en el suelo...'
‘¿Que lo pateen cuando está...? ¿Eres estúpida? ¿Por qué te preocupas por sus sentimientos cuando él dio tan poca importancia a los tuyos cuando se acostaba con Jess? Contrólate, Amaris. Está teniendo todo lo que se merece'.
Amaris frunció el ceño. No estaba de acuerdo con su loba en esto y, cuando Fernando empezó a responder, se interpuso apresuradamente entre los dos, para disgusto de Maena.
‘Alfa, por favor. Hay cosas que es mejor no decir en espacios públicos. Esto no debería haber ocurrido aquí', interrumpió ella con calma, sonriendo a Dave.
Dave guardó silencio durante unos minutos mientras la miraba pensativo, con una expresión ilegible en el rostro, antes de inclinar la cabeza con elegancia.
‘Como desees, princesa’. Sonrió satisfecho, mientras levantaba los ojos y compartía con ella una mirada llena de significado oculto.
Amaris sintió que sus mejillas se sonrojaban de inmediato y se movió torpemente en el sitio.
‘¿Se conocen?’, preguntó Dave con los ojos entrecerrados, mientras los miraba incrédulo.
Amaris guardó silencio. Había acordado no decir nada a nadie sobre su acuerdo con Alfa Nocturne. Sería mejor que él se encargara de las preguntas. Así solo se sabría lo que él quería que se supiera.
No es que a ella le importara. Simplemente, prefería evitar el drama y los cotilleos de la prensa sensacionalista durante un poco más de tiempo. Quien dijo que toda la prensa era buena estaba muy equivocado.
Dio un paso hacia Fernando y, aunque su rostro permaneció impasible, Amaris pudo sentir la tensión en el aire. Observó a Fernando como un halcón, evaluando en silencio cada uno de sus movimientos mientras este perdía el control de su lobo poco a poco, pero con seguridad.
Y finalmente, enloqueció.
Con un rugido feroz, se lanzó sobre Dave, gruñendo y arañando salvajemente en su dirección.
‘¡Mantén tus sucias manos lejos de mi compañera, es mi loba, es mía!’.
Dave suspiró y, con asombrosa rapidez y agilidad, esquivó rápidamente su ataque frontal, empujando a Fernando por la espalda y enviándolo desparramado por la mesa hacia un lado.
Fernando gruñó mientras se levantaba rápidamente, con la cara enrojecida por una mezcla de rabia y vergüenza. Sin pensarlo, se lanzó de nuevo contra Dave.
Este resopló incrédulo ante la impulsividad del joven alfa. Esperó a que estuviera a escasos centímetros y volvió a esquivarlo, momentos antes de que pudiera alcanzarlo, miro a Amaris y le sonrió, esto hizo que ella se estremeciera sintiendo un escalofrío recorrer su cuerpo y sus mejillas arder, un poco más si a este punto era posible.
Su brazo salió disparado y la gran mano de Dave agarró la nuca de Fernando mientras lo forzaba hacia abajo y lo inmovilizaba contra el suelo en un rápido movimiento.
Maena ronroneó con aprobación ante la exhibición de Alfa Nocturne y Amaris puso los ojos en blanco internamente ante la facilidad con la que su loba se dejaba impresionar, pero ella también está impresionada.
Mientras Fernando forcejeaba contra el agarre de Dave, este se limitó a ponerse en cuclillas a su lado con una expresión ligeramente molesta en el rostro.
‘¿Es esto realmente necesario? Te comportas como un adolescente en la pubertad’, comentó en tono aburrido.
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