Esposa Obligada Del CEO Paralítico romance Capítulo 7

Jacob al verla así, la abrazó, sintiéndose furioso porque una vez más su hermana sufría por culpa de Victor, no consideraba nada justo que él tuviera el descaro de volver a aparecer frente a ella y lastimarla una vez más.

— Lo siento, fui descuidado está vez y seguramente por eso te encontró. — Se disculpó Jacob sin dejar de abrazarla, cuando se enteró que ella estaba mal no le había prestado atención a otra cosa y solo se había apresurado, ahora lamentaba mucho esto.

— No te tienes que disculpar. — Sollozó Maya, ella no podía culpar a su hermano cuando él era quien siempre estaba ahí para ella y para sus hijos. Fue la única persona que no la abandonó cuando más necesitaba de alguien.

Jacob solo siguió abrazándola hasta que consiguió que ella se calmara y cuando finalmente lo hizo, se secó las lágrimas para mirarlo con seriedad.

— Me preocupan los niños, él ahora sabe que estoy aquí, puede enterarse de ellos y quizás descubra que son sus hijos, no se si quiera quitármelos después de saberlo. — Comentó Maya, sintiendo como su corazón se arrugaba ante está posibilidad, ella ya no confiaba en Victor en absoluto, después de lo que le hizo lo creía capaz de cualquier cosa y que pudiera quitarle lo más importante para ella que eran sus hijos, la llenaba de miedo.

Antes de que Jacob consiguiera decir algo se escuchó una voz infantil y unos pequeños pasos bajando las escaleras, haciendo que Maya y Jacob que habían estado de espaldas a la escalera, dirigieran sus miradas al lugar.

— Mami, ¿Ese hombre que vino es mi papá? — Cuestionó Jake, mirándola con los ojos abiertos de par en par y el corazón de Maya dio un vuelco, no tenía idea de que decirle, pero no quería mentirle a su pequeño.

— Jake sube un momento, ¿Tú mamá no te había dicho que te quedarás en la habitación? — Preguntó Jacob, mirándolo con reproche, pero el niño ni siquiera le prestó atención a su tío, su vista seguía fija en su madre, mientras continuaba bajando las escaleras.

— Mami dime, ¿Es él? — Insistió Jake de pie frente a ella, él no sabía cómo sentirse, había espiado por la ventana al hombre que vino y se dio cuenta que se parecía mucho a él mismo y a su hermano, su color de ojos, piel y cabello eran iguales a los de ese hombre y sus facciones también eran parecidas, su hermano y él no pudieron evitar comenzar a sacar sus conclusiones y ahora que escuchaba las palabras de su madre, más dudas surgieron en su mente.

Ellos se parecían muy poco a su madre, Maya tenía los ojos verdes y cabello rubio, mientras el cabello y ojos de los niños eran oscuros, iguales a los de Victor.

— Si bebé, él es tu papá, ¿Tú quieres conocerlo? — Cuestionó Maya finalmente, intentando parecer calmada, mientras su corazón no dejaba de doler y sus miedos se hacían más profundos, porque si sus hijos querían conocer a su padre ella no podría negarles esto, tendría que decirle la verdad a Víctor y entonces él podría quitárselos.

Aunque ella contaba con todo el apoyo de Jacob no sería suficiente para impedirlo, porque su familia no la apoyaba y aunque lo hiciera, Victor seguía teniendo más dinero y poder, sería imposible ganar una batalla en su contra.

— No mami, si te hace llorar es porque es un hombre malo, no quiero conocerlo. — Respondió Jake abrazándola, al tenerla cara a cara se había dado cuenta que ella tenía los ojos rojos al igual que el resto de su carita, no le gustaba ver a su mamá llorar y culpaba de esto a su padre, porque ella no parecía estar triste antes de que él apareciera.

— Ella se quedó dormida hace rato. — Respondió Marcus encogiéndose de hombros, su niñera era muy linda con ellos, pero ya era un poco mayor y les había dicho que tomaran una siesta, ellos fingieron dormirse y la única que se quedó dormida rápidamente fue ella.

Jacob negó con la cabeza y Marcus se acercó a abrazar a su madre también.

— Ustedes son los mejores hijos del mundo, pero no quiero que piensen en mí, si no en lo que verdad quieren, yo soy su madre y quién se tiene que preocupar por ustedes soy yo, no al revés, así que si quieren conocer a su padre puedo intentar hablar con él, esto es mi culpa porque nunca se lo dije y les quite está posibilidad, mami lo siente mucho por ustedes. — Murmuró Maya mientras los abrazaba, estaba tan agradecida con la vida por darle hijos tan buenos, cuando casi todo el mundo a su alrededor la abandonó, sentía que solo por tenerlos a ellos en su vida todo el sufrimiento había valido la pena.

Jake y Marcus se miraron a los ojos y luego asintieron.

— Mami no te disculpes, no queremos conocerlo. — Dijeron al unisonó, esperando con esto poder convencerla.

— Esta bien, pero si en un momento cambian de opinión tienen que decírmelo. — Les dijo Maya sintiéndose aliviada, ahora solo rogaba porque Victor no volviera a aparecer de nuevo por aquí.