La chica fénix: ¿Mi mate? romance Capítulo 15

Estaba tranquila durmiendo soñando con pajaritos y unicornios (mentira estaba soñando con mi sexy lobo) hasta que siento que algo pesado encima de mí, abro mis ojos asustada para ver que era y me encontré con el señor colmillos que se me había echado encima.

Adoro a Yack pero a veces se comporta como un niño pequeño y también adoro eso por que siempre hace algo para enojar a alguien pero esta vez es a mí a la que quiere hacer enojar.

—Oye quita que me ahogas— lo trato de quitar, pero se hace imposible, ya que mi cerebro no se había conectado con mi cuerpo.

—No, déjate querer— me abraza fuerte inmovilizándome el maldito está utilizando sus poderes es fuerte igual a mí y es muy raro para un vampiro ellos fuertes, pero no tanto como yo.

—Yo me dejó querer cuando no tengo a un saco de huesos con colmillos encima — vuelvo a moverlo, pero ni se inmuta.

—Cállate y vuélvete a dormir — ordena, pero a mí ya se me quito el sueño y ya me dio hambre que raro no.

—Porque mejor no vas a molestar a Yassi — poco a poco intento agarrar una almohada para golpear a Yack, pero se da cuenta y me abraza más fuerte.

— No, ella está ocupada con su mate — me vuelve a usar como almohada en venganza.

— ¿Qué está haciendo tan temprano? — él me mira y se ríe como que si le hubiera dicho alguna broma.

— Hay mi Eli eres líder de un ejército inmortal, hija de un Dios y no sabes que significa que esta “ocupada” — dice entre risas — utiliza tu olfato y olerás tu respuesta— lo quedo viendo un rato y le hago caso utilizo mi olfato, aunque es casi imperceptible mi olfato es más desarrollado que la de los hombres lobos y lo capto ese olor a sexo.

—Vaya Yassi no pierde tiempo — le digo y él se ríe mientras asiente con la cabeza.

— Eso es lo que digo ahora si duérmete— pensarán que es raro que nos tratemos así, pero desde que llegué de nuevo a esta dimensión conocí al señor colmillos y nos hicimos buenos amigos hasta nos gastamos bromas de mal gusto unas peores que otras.

Es uno de los mejores seres que he conocido lo quiero como si fuera mi propio hermano y de que el siente lo mismo por mí.

—No, ya no quiero mejor quítate porque si viene el lobo gruñón te mata si nos ve de esta posición — lo quiero demasiado a mi amigo como para que lo hagan picadillo de colmillos.

—Sabes que no le tengo miedo a ese chucho Pulgoso— me dice —aparte las habitaciones son a prueba de ruidos — me señala todo el cuarto.

—Claro y eso no quita de que sigues utilizándome como una almohada, así que quítate— le digo

—No— aquí comienza este con su rabieta.

—Que te quites

—No

—Quítate

—No

—Yack, ya hablé

—No, no, no, no, no —me vuelve a abrazar más fuerte.

—Yack

—¡¡NO!!, quiero— grita muy fuerte, si no se escuchó ese grito en toda la manada sería puro milagro, pone cara de maniático y eso sólo dice una cosa está planeando algo muy divertido para él y muy malo para mí.

Comienza hacerme cosquillas yo odio las cosquillas las odio mucho cuando era humana les tenía pavor incluyo lloraba ahora las soporta igual no puedo respirar.

—Ya Yack para por favor— le pedía, pero el muy hijo de su vampira madre no me hace caso.

—No, tú no quieres dormir ahora te aguantas— sigue haciendo hasta que siento otro peso en mi cama y me doy cuenta de que es Yassi.

— Así que se divierten sin mí —ella se tira encima de Yack para hacerle cosquillas y ayudarme, pero no sé cómo el término haciéndonos cosquillas a las dos, me doy cuenta del aroma de mi amiga y hago que Yack para de hacernos cosquillas.

—Yassi, aunque sea te hubieras bañado— me tapó la nariz.

— Si me bañe porque lo dices — pone cara de (no entiendo ni mierdas de lo que me hablas).

—Pues que apestas a sexo incluso este cuarto ya apesta — le dice el vampiro y nuestra amiga se sonroja en serio que cosas no ha de ver echo y ahora se sonroja.

—Bu..e..e.no ustedes saben que César es…..e……s mi mate bu…..eno ...pues —se rasca la nuca nerviosa— él me dijo que esperaría cuando esté lista …..y bueno lo bese por comprenderme, el beso cada vez se volvió más intenso y bueno pues ya saben el yo hicimos el amor — cuando mi amiga se pone nerviosa repite siempre “bueno pues" está apenas y eso lo sé, pero lo que dijo Yack es verdad el cuarto apesta a sexo y eso que aquí no pasó nada no me imagino como a desatar el cuarto de ella.

—Como sea — dice mi amigo un poco raro, es raro, pero recién me doy cuenta de que Yack se ve raro, me enredo yo misma.

—¿Que tienes? — aparta la mirada

—Nada es sólo que nada— da un fuerte suspiro y se tira de espaldas a la cama.

—Vamos dinos que tienes tú no eres de estar triste de un momento para otro — le dice Yassi preocupada por mi amigo.

—Es que ustedes ya encontraron a sus mates y se van a olvidar de mí — lo dice con tono melancólico; Yassi y yo nos tiramos encima de él y lo abrazamos.

—Yack nosotras nunca te vamos a olvidar eres como nuestro hermano jamás pienses eso, tú vas a encontrar a tua cantante y cuando lo hagas serás tan feliz que te olvidaras de nosotras— le digo

—Si es que la encuentro— susurra— pero está bien sobreviviré, ahora durmamos un rato es temprano porfa — Yassi y yo nos miramos y asentimos no quiero que mi amigo se sienta sólo ya vive eso con sus padres así que nosotros no le aremos eso.

Lo abrazamos y nos volvimos a dormir, estuvimos así hasta que escucho un golpe fuerte y a dos personas gritar.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: La chica fénix: ¿Mi mate?