Político busca niñera romance Capítulo 6

Narra Demian.

Ingresé al club de stripper donde solía venir, eran alrededor de las ocho de la noche, me reuniría con Santiago y Adán, era algo que hacíamos de vez en cuando. Hemos sido mejores amigos desde los diez años. No los veía tanto como me gustaría, pero me mantenían cuerdo cuando lo necesitaba. La música estaba alta como de costumbre, en los tubos estaban las mujeres bailando haciendo su show.

—Hola—me saludó Santiago.

—Oye ¿Dónde está Adán?—le pregunté tomando asiento.

—En un privado—respondió con una sonrisa, lo que me indicaba que estaba follando alguna de las mujeres que trabajaban aquí.

—¿Cómo han estado las cosas?¿Cómo va tu campaña?— preguntó.

—Bastante bien, sere de nuevo el alcalde de Fox—le dije seguro que yo ganaría, no había otro candidato que me hiciera competencia—. Y a ti ¿ Cómo te va ?—interrogue.

—Solo espero que cumplas con todas las promesas que has dicho en tu campaña—dijo riéndose— . En cuanto a mí, ese nuevo caso que te comenté me está dándome un jodido dolor de cabeza—respondió con algo de frustración—. Pero se que lo haré bien eventualmente—dijo muy seguro de si mismo. Él era uno de los mejores abogados penalista del país.

En ese momento Adán, regresó a la mesa.

—Amigo que bueno verte—dijo en cuanto llegó, luego le hizo una señal al mesero para que nos trajera unos tragos —.¿ Qué hay de nuevo?—interrogó.

Me quedé un momento en silencio.

—Bueno, contraté una nueva niñera—respondí.

—¿Cómo es ella?— Preguntó Santiago rápidamente.

—Jodidamente caliente—suspire.

—Porque cambiar si lo mejor del mundo es follar, además te puedes encontrar con situaciones realmente deliciosas—dijo Adán orgulloso—. Por ejemplo, la otra noche, estaba en el club Blue & Black, y conocí a una pelirroja muy sexy, ella quiso que fuera a su departamento, así que lo hice, luego cuando llegamos se quedó completamente desnuda, pero de repente, la puerta de la habitación se comenzó abrir, una chica castaña ingresó también desnuda, luego preguntó si podía acompañarnos en la cama, le respondimos que si, y al minuto tenía a la pelirroja cabalgando mí polla y a la castaña sentada en mí cara. Al parecer eran amigas y compartían más que la renta—finalizó su relato.

Ambos reíamos siempre por sus locas historias. Luego de eso, volteé a ver a la mesa que estaba cerca de nosotros, vi a dos hombres que se sentaron a disfrutar como todos los demás, no los conocía en persona, pero si sabía quiénes eran, uno se llamaba Xander, él trabajaba para el otro hombre que lo acompañaba, su nombre era Adbiel, este tenía una especie de cicatrices en su rostro, lo cual lo hacía ver cómo un monstruo, de hecho ese era su sobrenombre. Su negocio era la venta ilegal de armas, como alcalde tenía conocimiento de estos asuntos. Unas chicas semidesnudas se acercaron a ellos y comenzaron a bailarles sobre sus piernas, luego el monstruo, le dijo algo a la chica, ella le respondió, pero él se enfureció, la tomó del cabello y la golpeó contra la mesa que estaba cerca de ellos, la nariz de ella comenzó a sangrar, por supuesto se quejó del dolor, todos los presentes en ese momento voltearon a verlos. Después él le volvió a decir algo a la chica. Antonio, quién era el dueño del lugar se acercó a él he intercambiaron palabras, poco después las chicas se alejaron y todo volvió a la normalidad.

Minutos después la música se detuvo.

—¡El club ha adquirido una nueva bailarina, estoy seguro que los dejara impresionado!—comentó el animador—. ¡Con ustedes: mariposa negra!—anunció dejando ver a una mujer con una sexy ropa interior de encaje negro con medias altas, en su rostro llevaba un antifaz del mismo color, comenzó a bailar en el tubo con mucha agilidad todos los ojos presente la veían hipnotizado. Se podía ver un tatuaje de una mariposa negra en su espalda. En ese instante recordé un rumor sobre una especie de asesina o de vengadora quien eliminaba a narcotraficantes o personas con actividad meramente ilícitas que afectaban a las personas de una u otra manera(trata de personas, venta de todo tipo de drogas, entre otras) y que siempre dejaba un dibujo de una mariposa negra sobre el pecho de su víctima, eso era como su sello. Seguramente ella era esa mujer que tanto se hablaba.

En ese instante, con su baile erótico, me dio ganas de follar, no podía quedarme mucho tiempo en el club, tenía una charla pendiente con la nueva niñera, así que pedí un privado con una de las chicas para pasar un momento de relajación. Me despedí momentáneamente de mis amigos, me dirigí a unos de los espacios cerrados donde eran los privado y me acomodé sobre el enorme sofá horizontal de color rojo y negro. Poco después llegó Roxana, ella sería mí desahogó está noche, su piel era blanca, sus pechos que estaban descubierto eran grandes y apetecibles. Llevaba unos tacones altos de aguja y unas bragas de encaje. Su rostro llevaba un antifaz rojo. Comenzó a bailar, se dio la espalda y se movió sobre mí polla, haciéndola que creciera con sus movimientos. Luego se detuvo, se puso frente a mí, y bajó hasta quedar frente a mí dura polla, me desabroché el pantalón y dejé visible a mí amigo. Ella comenzó a chupármela exquisitamente con unos movimientos de lengua increíbles. No podía resistir más, así le pedí que se quitará las bragas, ella lo hizo, me puse pie he hice que se pusiera en cuatro en el sofá, me bajé el pantalón y me puse un condón, luego la folle duramente ella gemía en cada embestida. En ese momento cerré los ojos y la imagen de la nueva niñera con sus pechos visibles debajo de su camisón se instaló en mí mente, ese instante me excité aún más, comencé a follar a Roxana frenéticamente mientras mis fantasías con la señorita Smith se realizaban en mí cerebro. Pronto pude sentir y oír que Roxana se había corrido, y justo en ese momento yo también.

Después de unos minutos, ella se fue. Mí polla todavía estaba dura de la excitación, así que me quedé un rato más, tomé mí polla y me masturbé pensando de nuevo en ella en: Amanda Smith.

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