Esposa Obligada Del CEO Paralítico romance Capítulo 24

— Lo es, es muy real mi cielo. — Aseguró Victor tomando su carita entre sus manos para darle un beso en la frente. — ¿Él no te hizo ningún daño verdad? ¿No te lastimó de ninguna forma? — Preguntó frunciendo el ceño y observándola con cuidado, porque ahora que lo pensaba mejor, se había dado cuenta que había confiado demasiado en la palabra de un hombre que ni siquiera conocía, solo esperaba que realmente él no le hubiese hecho nada o se volvería loco.

— No, fue extraño, pero no me lastimó ni intentó hacerme daño de ninguna manera, podría decir que incluso fue amable, solo que me contó algo que rompió mi corazón, mi papá hizo algo muy malo. — Respondió Maya al mismo tiempo que sus ojos se comenzaban a cristalizar al recordar lo que le había contado su captor acerca de lo que hizo su padre, todavía le costaba creer que él pudiera ser tan cruel, de solo pensar en eso se sentía demasiado triste y también le daban ganas de vomitar, estaba decidida a pedir a la policía que investigara sobre esto, para hacer justicia. — Pero a pesar de eso, él aún así me liberó, hizo lo correcto, ahora me toca hacer mi parte y dejar que la policía haga justicia.

Victor al escucharla, se quedó quieto por un instante, no sabía que le había dicho ese hombre, pero podía darse cuenta de que ella claramente estaba confundida acerca de lo que pasó y él no tenía ganas de decirle la verdad en absoluto, no quería que ella lo mirará con odio y volver a perderla cuando apenas la acababa de recuperar.

— ¿Qué hizo tu papá? — Preguntó Victor sin dejar de mirarla a los ojos y Maya negó con la cabeza, con su mirada llena de dolor.

— No quiero hablar de eso en este momento, quiero ver a los niños, ¿Dónde están? es la primera vez que estoy lejos de ellos por tanto tiempo y deben estar preocupados. — Respondió Maya, no quería seguir pensando en esto, al menos no en este momento, quería primero ver a sus niños y asegurarles que todo estaba bien, después hablaría de lo de su padre con Víctor para ver si él la podía ayudar a manejar este asunto de la mejor manera posible.

— Muñequita eso tendrá que esperar, ellos están quedándose con mis padres, no quería exponerlos a que les pasará algo si los traía aquí y bueno allá son las cuatro de la mañana, deben estar durmiendo aún. — Explicó Victor y ella asintió un poco abatida.

— ¿Ya Jacob sabe que estoy bien? — Cuestionó Maya y Victor asintió.

— Ya lo sabe, mañana podrás verlo antes de irnos a buscar a los niños, ¿Tienes hambre? — Preguntó Victor, intentando cambiar la conversación, porque no quería hablar de esto, se negaba a revelarle la verdad aún.

— No, solo quiero quedarme abrazada a ti, para despertar en unas horas y llamar a los niños rápidamente, quiero saber cómo están. — Suspiró Maya y Victor de inmediato la envolvió en sus brazos y unos minutos después ella se quedó dormida abrazada a él, porque los somníferos aún estaban en su sistema.

— De verdad lo siento mucho muñequita, no debería haberte ocultado lo que pasó, pero al menos quiero disfrutar de este momento, poder dormir contigo entre mis brazos, por si después no quieres volverme a ver.— Susurró Victor acariciando su mejilla con ternura y luego le dio un dulce beso en los labios.

…

— Eres un bastardo, ¿Cómo pudiste hacer eso? Te voy a matar. — Gritó Jacob aproximándose hacía Victor furioso, apenas lo vio.

Victor se tensó, pensaba primero en llevar a desayunar a Maya a un lugar lindo y luego comentarle lo que ocurrió, sabía que eso la destruiría y por eso había estado tratando de evitarlo, pero al encontrar a Jacob frente al hotel donde se estaban hospedando cuando iban saliendo arruinaría sus planes y empeoraría todo, no quería que Maya se enterara así, porque sabía que todo sería peor, así que soltó una maldición por lo bajo, arrepintiéndose de no haber intentado esconderse, pero es que después de recuperarla, lo único que le importaba es que ella pudiera despertarse en un lugar lindo y estar con ella, además pensó que Jacob tardaría más tiempo en encontrarlos e igual pensaba en reunirse con él después del desayuno, luego de haberle contado la verdad a Maya.

Maya miró a su hermano totalmente confundida, sin entender nada.

— Jacob cálmate, ¿Qué está pasando? — Preguntó Maya poniéndose en medio para impedir que se acercara a Víctor.

Maya lo miró devastada, esperando que él negara esto, pero al ver que Victor no podía decir nada, que estaba como congelado y mirándola con cierta culpa, entendió que Jacob decía la verdad y en ese momento sus piernas fallaron, casi haciéndola caer, pero Victor sostuvo rápidamente su cintura, lleno de preocupación y dolor al mirarla así.

— No, no me toques, ¿Cómo pudiste hacer algo así? — Espetó Maya mientras sus lágrimas comenzaban a caer.

— Lo siento mucho muñequita, lo hice porque soy un jodido egoísta, porque no quería perderte, porque no quería que nuestros hijos perdieran a su madre, porque no quería que sufrieras ningún daño, porque te amo y porque sabía que si no hacía algo pronto podrías morir e igual ese hombre iría por tu padre, él ya estaba sentenciado, en cambio tú podías salvarte, perdóname. — Explicó Victor, sintiendo como cada fibra de su corazón dolía por verla sufrir y sentir que la perdía.

— Igual me perdiste, no debiste hacer algo así, quizás él igual podría dejarme ir, pero a papá nunca lo dejará ir, lo odia demasiado. — Sollozó Maya sin dejar de llorar, no se atrevía a imaginar lo que su padre podría estar viviendo. — Jacob tenemos que encontrarlo.

— ¿Dónde hicieron el intercambio? ¿Viste su rostro? — Cuestionó Jacob, pensando que quizás con un poco de información sobre ese hombre, podría facilitarse la búsqueda.

— No vi su rostro y el lugar que nos encontramos fue a las afueras de la ciudad, zona este. — Mintió Victor, que ese hombre de verdad cumpliera su palabra y nunca lastimara a Maya lo hacía parecer más honorable para él que Jerome, que no le importaba sacrificar a su propia hija por salir bien librado, además después de todas las cosas que hizo lo merecía y aunque no sabía que clase de venganza tenía aquel hombre contra Jerome, sabía que no debía ser por algo simple y de Jerome creía cualquier cosa, porque era una basura, por eso no estaba dispuesto a ayudarlo, pensaba que era hora de que él pagará una parte de todo el daño que hizo.

— Yo lo ví, pero no creo que eso realmente sirva. — Susurró Maya, dudando si debía decir lo que su captor le había contado y como él se veía, porque aunque quería que su padre estuviera bien, sabía que si Jacob lo encontraba podría matarlo o al revés y no quería que ninguno de los dos saliera lastimado, porque de alguna manera después de saber la historia de Killian ella se sentía muy mal por él, era un hombre que había sufrido demasiado y sabía que su padre si merecía pagar por lo que hizo, aunque no de esa manera.