Después de salir de clases Aria recibió un mensaje de su amiga para encontrarse en un café cercano a la universidad y aceptó de inmediato, sentía que necesitaba despejar su mente por un rato de todo lo que estaba ocurriendo. Ya habían pasado dos días desde la llegada de Camille y aunque Lucien seguía tratándola muy bien ella se sentía bastante incómoda y extraña, especialmente con Luna, ella se había alejado bastante y esto le dolía.
Ya estaba demasiado acostumbrada a estar siempre muy cerca de la pequeña que había robado su corazón desde un inicio, pero ahora ella solo quería pasar tiempo con su madre y aunque podía entenderla, no podía evitar que esta lejanía le doliera, por eso necesitaba un respiro, así que se dirigió al café donde Clara ya la estaba esperando.
— Hola. — Saludó Aria con una pequeña sonrisa al verla.
— Que bueno que aceptaste venir, toma asiento. — Dijo Clara amablemente. — Sabes me preguntaba si puedes ir de compras conmigo hoy, es que no me gusta ir sola y no tengo más amigas, solo a ti.
— No lo sé, es que tengo algunas cosas…— Murmuró Aria un poco dudosa, ella no quería gastar más dinero de Lucien, él ya le había comprado muchas cosas y ella además había estado tomando dinero de la cuenta que le dio para enviarle un poco a su madre para que siguiera atendiendo a su abuela bien.
— Anda por favor, nos vamos a divertir, eres la única persona además de mi hermano que tengo aquí, acompáñame, ¿Si? — Insistió Clara haciendo un puchero y Aria sonrió al ver a su amiga así, como se veía tan tierna se le hacía realmente difícil negarse, además no pudo evitar recordar que Clara siempre fue muy buena con ella en el pasado, podía hacer esta pequeña cosa por ella y como lo que buscaba era tomar un respiro de lo que le estaba ocurriendo podía acompañar a Clara así no comprara nada.
— Esta bien. — Aceptó Aria y Clara sonrió alegremente de inmediato y se acercó a Aria para tomar su cara entre sus manos y darle un beso en la mejilla.
— Eres la mejor. — Aseguró Clara sonriente y Aria se alejó un poco, sorprendida por la reacción de su amiga.
— No hagas eso, no es gran cosa. — Susurró Aria un poco avergonzada y Clara solo siguió sonriendo.
Después de que ambas tomaron un café y pidieron unos postres se dirigieron a un centro comercial y Aria observaba a su amiga comprar demasiadas cosas, ahora podía recordar que esta también tenía demasiado dinero.
— Aria, ¿Por qué no compras nada? ¿Tu esposo no te da dinero? — Preguntó Clara preocupada frunciendo el ceño ligeramente, sabía que el hombre con quién Aria estaba casada debía tener mucho dinero, por lo que no entendía porque ella no compraba nada para si misma. — Si es así no importa, puedo comprarte lo que te guste.
— Si me da dinero, ya tengo muchas cosas lindas, no necesito nada más, no es necesario que me compres nada, gracias. — Se negó Aria con una sonrisa, se le hacía un poco extraño las preguntas y el ofrecimiento de Clara, pero sabía que no lo hacía con mala intención, solo que se preocupaba por ella y por eso estaba agradecida.
— ¿Estás segura? — Preguntó Clara poco convencida y cuando Aria estaba por responder se escuchó la voz de alguien más.
— Wow hermanita vienes al centro comercial a gastar el dinero de tu esposo cuando la abuela esta tan enferma necesitando dinero al igual que nosotros, pero tú prefieres gastarlo solo en ti, si que eres egoísta. — Masculló Michelle mirando a Aria llena de odio y envidia.
Estos últimos días habían estado bastante restringidos de dinero y ya no podía seguir con la vida llena de lujos a la que estaba acostumbrada y eso la estaba volviendo totalmente loca, por eso ver a Aria en el centro comercial la hizo pensar que estaba gastando el dinero de Lucien, el cual debería ser suyo.
— Michelle no digas tonterías, no es tu problema en lo que gaste mi dinero, ocúpate de tus propios asuntos. — Dijo Aria apretando los dientes, no entendía como Michelle podía reclamarle algo cuando no había persona más egoísta y mala que ella.
— Hermana no puedes ser así, por favor solo ayuda a nuestros padres. — Pidió Michelle tomándola del brazo y acercándose mucho más a Aria. — Recuerda que todo lo que tienes ahora a quien debería pertenecer le es a mí, así que empieza a enviar más dinero, claro esto si quieres que la abuela este bien. — Susurró solo para que Aria pudiera escucharla.
Todo iba mal para ella mientras todo parecía ir bien para Aria a pesar de estar casada con un paralítico y eso no podía soportarlo, la llenaba de celos.
— Tú fuiste quien no quiso casarse con él, si lo hubieses hecho nada de esto estaría pasando, así que deja de quejarte. — Dijo Melissa molesta, aunque amaba a su hija con todo su corazón no podía evitar pensar en que si ella no se hubiese metido con Noah la vida de ellos estuviese mucho mejor y la de Aria no.
Michelle miró a su madre un poco sorprendida ya que está nunca le había hablado así y se sintió mucho más agraviada, pero luego algo llegó a su mente.
— Mamá, ¿Y si hacemos que se divorcien para que se case conmigo? Después de todo soy yo quien debió casarse con él, podrías hablar con ellos para hacer todo esto posible. — Espetó Michelle llenándose de alegría, pensando que había tenido una gran idea.
— Michelle ese hombre no va a aceptar casarse con alguien de esta familia de nuevo, además, ¿Cómo podríamos hacer que deje a Aria? Esto es imposible. — Respondió Melissa molesta.
— Mamá, ¿Si encuentro la manera de que él la deje crees que puedas hacer que acepten que sea conmigo con quién se case? — Preguntó Michelle mientras su mente comenzaba a llenarse de ideas para lograr su objetivo.
— Michelle, todo lo que tiene Lucien lo perderá pronto, así que no te molestes con esto, si te hubieses casado con él antes nos hubiésemos podido beneficiar más, pero ahora no tiene sentido que lo hagas, no pierdas el tiempo. — Se negó Melissa, pensando en que si su hija se hubiese casado con él al principio ella no estuviese contribuyendo a la caída de Lucien, pero ya era demasiado tarde para dar vuelta atrás, cuando los planes se dieran, tendrían mucho dinero y podrían hacerlos pagar por todo.
Michelle miró a su madre un poco sorprendida, sabía que su mamá estaba haciendo algo en contra de Lucien junto a su familia, pero no lo había tenido muy claro hasta ahora, ya que nunca presto mucha atención.
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