Mi Resiliencia (COMPLETA) romance Capítulo 10

Nikolas

Paso mis dedos por las fotografías que están sobre la repisa, hay varias en dónde aparece Anika junto a otras personas, continúo observando y hay una en donde aparece una mujer rubia con ropa de camarera sonriendo, está detrás de un mostrador en una cafetería.

Justo cuando entramos le entregué sus pertenencias a Anika, ella las tomó y fue a guardarlas, las fotos que estoy admirando llamaron mí atención desde que llegue, di un recorrido con mí vista por la sala de estar en la que me encuentro, la decoración es muy estilo vintage, todo está muy organizado, ya puedo ver qué no solo es aplicada en su trabajo sino que también se ocupa de su espacio personal.

Anika es muy impactante mujer, llena de paciencia y sabiduría, el acercamiento que ha logrado con Dániel es impresionante, en tan solo un mes en el que ha tratado a mí sobrino y dos terapias familiares con Nicole y conmigo, ha logrado que el pequeño se abra más, ahora socializa con sus compañeros de clase, está más animado a completarlo sus tareas y como parte de su terapia le escribe todos los días una carta a su padre, Anika dice que es una forma de Dániel expresar sus emociones.

Continúo con mí labor de esperar a Anika y tomo la foto para apreciar más de cerca, el marco es de madera oscura, la foto debe tener unos quince años, el color amarillento y el peinado de la joven que está en ella me hacen pensar así.

—Es mi madre— Anika aparece, lleva puesto un vestido negro que la hace ver más coqueta y hermosa, vuelvo a mirar la foto y la coloco en su lugar.

— Disculpa, llamó mi atención y me acerque a observar— le dejo saber, soy muy curioso — es una mujer muy hermosa— le digo respecto a lo que dijo anteriormente —te ves muy guapa— le algo respetuosamente.

—Gracias— ella me sonríe con esa deslumbrante sonrisa que me eriza la piel, me tiene más que embobado y es que no le puedo quitar los ojos de encima quieres sentarte— me ofrece y yo asiento tomando asiento en el sofá en forma de L que ocupa de la sala — tengo  jugo en el refrigerador— me ofrece —es lo único que puedo ofrecerte.

—Gracias, estaría bien— le digo y ella se va a la cocina, es un concepto abierto desde la sala se puede ver el comedor y la cocina, al cabo de un rato vuelve con dos vasos en una bandeja acompañado de galletas saladas.

—Gracias por tomarte la molestia de traer mis cosas— me agradece y yo no podía estar con que contento conmigo mismo, pude entregárselo mañana cuando llevara a Dániel al colegio, sabía que saldría con su abuela, me arriesgue a venir a un sabiendo que posiblemente no la encontraría, pero gracias a Dios si lo logré.

— No es nada— le digo mientras tomo un sorbo del delicioso jugo - mmmmmm está delicioso- es verdad está bastante bueno.

— ¿Eres bueno con los sabores?— pregunta y yo la miro sin entender — es decir si sabes reconocer los sabores — me dice y ya entiendo a qué se refiere.

—Mmm bueno la verdad no— le digo y ella se ríe —no te burles solo disfruto comer sin saborear— le digo.

—Eso no es disfrutar lo que comes o tomas— me dice mientras se quita los tacones y se sienta sobre sus piernas en el sofá, el vestido se le sube más arriba de las rodillas — cuando comes algo, debes idéntificar los sabores.

—Amo comer, no me tomo el tiempo para eso— le dejo saber y ella se lleva el vaso a los labios degustando con su paladar

—¿Dime de qué es el jugo?— me pide y yo no tengo ni la menor idea, solo sé que está delicioso.

—La verdad no tengo idea— le digo y vuelvo a dar un sorbo.

— Eres increíble, quiero que hagas algo— me dice mientras deja su vaso sobre la mesita de centro — tomarás un sorbo, cerras los ojos y te transportaras a esos sabores, donde lo has saboreado antes- me pide y yo obedezco, cierro mis ojos y me concentro en el sabor, los recuerdos de mi mente se activan, huelo el contenido del vaso y el olor me deja claro lo que es " mango"

— Mango— me digo abriendo los ojos y ella sonríe.

Aplaude— muy bien Nikolas, eres un buen alumno— me dice y yo dejo el vaso sobre la misma mesa de centro, me enfoco en ella.

— Tus técnicas me ayudaron a identificar— me sonríe — cuéntame sobre ti, vives sola, con tus padres— le digo y veo que sus ojos se entristecen.

— Vivo sola— me dice y siento que se está conteniendo algo — mis padres murieron— me dice y yo me molestó conmigo por haber preguntado cosas que no debía.

- Disculpa no sabía nada- le digo y me acerco a ella, se le ha enrojecido la nariz y tiene los ojos aguados.

— Tranquilo, tú preguntaste y yo respondí— me dice y su fragilidad momentánea me llevan a abrazarla, ella recuesta su cabeza en mí pecho, dejo que repose, no me puedo imaginar lo difícil que es no tener a tus padres.

—Murieron en un accidente cuando yo tenía dieciséis.

— Lo siento mucho.

— Mí madre no tenía familiares vivos y mi abuela es muy mayor para tener mí custodia por lo que el estado de Utah me ofreció casas de acogida— no puedo imaginar lo difícil que ha de ser para ella todo, apenas era una adolescente — pase por varias familias hasta que cumplí los dieciocho y ingresé a la universidad, fui emancipada y mi abuela me regaló éste lugar— la abrazo y beso su cabeza es una persona muy valiente, a pesar de pasar por tantas cosas juntas, si ella no me cuenta está parte de su vida yo no lo creería, siempre están sonriendo  de forma genuina.

— Eres un ser muy fuerte Anika— le digo y le elevo el mentó sus ojos color miel han derramado algunas lágrimas, las limpio de sus mejillas, tomó sus orejas con mis dedos y las acaricio quiero que sienta que puede confiar en mí.

—Gracias por escuchar— me dice y sus rojos labios me invitan a fusionarlos con los míos, un rico beso con sabor a mango con lágrimas, es una sensación mágica degustar sus labios invadir su boca con la mía y sentir la plenitud que me llena con solo un beso de sus labios.

Nos quedamos así abrazos en el sofá de su sala, como si fuera una necesidad de nuestros cuerpos estar cerca del otro, le muestro mí Comprensión y soporte, ella es psicóloga y sabe de muchas teorías para lidiar con la pérdida, así a ayudado a Nicole y Dániel, pero ella ha vivido en carne propia ese dolor, por eso a conectado tan rápido con ellos, pero sé que cómo hija le hace falta el consuelo de sus padres.

Hablamos una rato más, trato de animarla ya que hablar de sus padres la pone triste, le hago una que otra broma para romper la tensión y ella cede ante mis chistes mal contados.

(*)

Llegó a mí casa, las luces están apagadas, ya es más de la una de la madrugada, Nicole y Dániel ya están dormidos, la velada con Anika me saca una sonrisa, me encanta todo en ella, y hoy podernos acercar más me hace sentir bien.

No hemos definido que somos, no quiero espantarla, apenas nos estamos conociendo, los besos que nos hemos dado me dejan claro que no seremos solo coquetería, ella me gusta y enserio disfruto de su cercanía.

A la mañana siguiente en mí oficina, firmo algunos papeles que requieren de mí Aval, lleve temprano a mí sobrino a su escuela, no tuve oportunidad de ver a Anika pero puedo asegurar que estaba en su oficina, ella es muy responsable.

La fábrica de Cristalería de mí familia ha crecido exponencialmente, mi abuelo hizo una malas jugadas en el pasado pero mi padre limpio su trayectoria, cumplió unos años en servicio en la CIA, se volvió el mejor agente creador de las armas entre otros utensilios que elevaron su nombre, yo seguí sus pasos y me convertí en un fabricante de cristales, tenemos más de treinta fábricas en más de veinticinco países, en Estado Unidos tenemos dos, una en Wisconsin y otra acá en Utah.

Suena el teléfono y contesto — disculpe señor, su amigo Marcos quiere verlo— me dice Lissy mí secretaria, sonrió debido a su noticia.

—Claro, hazlo pasar— le digo y cuelgo deteniendo mí trabajo y poniéndome de pies para recibir a mí amigo, el abre la puerta — hombre aquí estás— lo saludo con un fuerte abrazo, es mi mejor amigo desde la infancia, nuestras madres son mejores amigas incluso tienen una empresa de decoración que ha crecido mucho gracias a Nicole y Marilyn la hermana de Marcos.

— ¡Hermano! — me responde de vuelta.

—Me alegra que estés aquí — le dejo saber ya que él se integrará conmigo cómo el abogado oficial de la empresa —ve, siéntate— lo invito.

Nos ponemos al día de lo que ha acontecido en nuestras vidas, él vive en Wisconsin pero se mudará a Utah, es un abogado independiente, no trabajaba para ningún bufete, él quiere tener el suyo propio.