Mi Resiliencia (COMPLETA) romance Capítulo 20

La Educación es parte esencial del ser humano, va más allá de ser cortés con las demás personas solo por nosotros mismos, más bien es para hacer sentir bien a los demás, el hecho de que la tía de las niñas fuera grosera al no corresponder mí gesto de cortesía groseramente, e ignorando mí presencia no me desanima, ya que a veces estamos tan sumergidos en nuestros problemas, que los arrastramos con nosotros consientes e inconscientes, para ser quieres somos.

Tengo un lema y es siempre tratar a las demás personas con amabilidad, no sé cuánto sufrimiento emocional ésta atravesando la persona, y un gesto descortés desmotiva su espíritu y quebrante su alma.

Abrazo a Lissy quien con la mirada me pide disculpas por las acciones de su tía, —debes hablar con tu padre cariño— le recuerdo ella asiente.

— Sí Anika, muchas gracias por todo— me dice ella y por su semblante puedo notar que está más relajada.

— Un placer conocerla Laura—le digo a la pelirroja que no me quita la mirada de encima, me escanea con desagrado pero no me importa si le caigo bien o no, lo que interesa es que Lissy, Lili y Arthur puedan solucionar sus diferencias —le diré a Lourdes que traiga a Lili— beso la mejilla de Lissy y me marcho bajo la mirada de la tía.

Abro la puerta de la librería y me relajo la sonrisa de Lili me indica que está más tranquila, ella le muestra a Lourdes la forma correcta de organizar las piezas del rompecabezas, me acerco a ellas.

—¿Todo bien?— indago.

—Anika volviste—dice ella sonriendo —ya encajamos todas las piezas mira— me muestra y confirmo.

— Sí nena, son unas genios— le elogio— Lissy se siente mucho mejor— le indico —tu tía Laura las ésta esperando— ella se emociona mucho más al escuchar la mención de su tía —es todo por hoy, debes volver a casa.

—Gracias Anika— me dice alegre y junto a Lourdes abandonan la librería.

Con Ritha organizamos algunos proyectos para alentar a lectores, pensamos en tener varios clubes de lectura, dividirlos en secciones por edades y horarios, Ritha me anima a dar tutorías a estudiantes con dificultades de aprendizaje, le digo que lo pensaré ya que son muchas tareas por hacer y en todas se requiere de tiempo y dedicación al cien por ciento.

Al llegar a casa pienso en la propuesta de Arthur de terminar mí cuento, por lo que en una libreta escribo algunas ideas que me han surgido al respecto, es una obra que con mucho amor he pensado pero Lili fue quien me motivo a escribirla.

Leo un mensaje que Homi me envía diciendo que cenaremos en un restaurante de la ciudad, un local de unos amigos de Cristian, dejo lo mis apuntes para empezar a arreglarme, limpio mí cuerpo, me visto de forma casual con un vestido holgado color azul, me calzo los pies con unas sandalias de tacón medio altos, dejo mí cabello suelto y me maquillo de forma sencilla, Cristian y Nahomi ya llegaron y se alistaron.

Salgo a la sala y ellos me esperan ya arreglados —WOW lucen espectaculares— de elogio y Homi se da una vuelta sobre su propio eje mostrando su conjunto de falda tubo y top strapless verde oliva, Cristian no se queda atrás luciendo un traje gris oscuro con camisa blanca.

— Tú no te quedas atrás— me indica Homi.

— Ambas lucen hermosas— nos dice Cristian —pero debemos de irnos chicas— nos indica y los tres salimos del edificio abordando el auto, nos ponemos en marcha.

— Esta noche es para relajarse— dice mi amiga —nada de pensar en cosas negativas— me dice y asiento, tiene razón la vida ha sido buena conmigo al darme la oportunidad de conocer personas que valen oro puro.

Llegamos al lugar y todo es muy bien organizado, es un restaurante con estilo terraza con vista al lago Kensington de Gardens, Londres es un hermosa ciudad, nos sentamos y disfrutamos de una cena llena de anécdotas que me hacen reír sin parar, ellos me cuenta la historia de cómo se conocieron y es muy gracioso para mí.

— La presentación de la ópera será éste sábado— indica Cristian —aquí tengo varios boletos para que lleven a quienes quieran— me entrega tres boletas y pienso a quienes puedo invitar.

Cristian nos explica lo emocionado que está, aunque su compañera de lírica se lesionó las cuerdas vocales y tuvo que ser reemplazada en el último momento, pero quien la reemplaza tiene los conocimientos necesarios.

— ¿Cómo la están pasando?—dice una voz masculina, Cristian se pone de pie.

— Hermano— Cristian y el sujeto que habló anteriormente se estrechan las manos y se dan un abrazo, Homi me pone de pie por igual y lo saluda.

— ¿Cómo están?— dice el sujeto.

—Todo perfecto— indica Homi.

— Espectacular cómo siempre— corrobora Cristian.

—Buenas noches— me dice extendiendo su mano y la estrecho sonriendo, por su aspecto deduzco que es el chef su camisa filipina y su gorro toque blanque —soy Eliézer Montana— se presenta.

— Anika Brown— me presento.

— Es mi hermana— dice Homi.

— Es un gusto conocerte Anika.

— No, como ya sabes su tía se las llevó y no tuvimos tiempo de hablar— me dice.

— Siempre hay tiempo para hablar y escuchar— le digo —no me tomes a mal lo que te digo, pero ambos necesitan su tiempo de acercarse y conocerse nuevamente.

— Ne duele mucho lo que mi hija ésta pasando y no sé cómo ayudarla, Anika— se pasa la mano por la cara —ésta rebelde e impulsiva, mi niña no era así antes— en sus ojos puedo leer su dolor, poso mis manos sobre las suyas en señal de que lo entiendo.

— Ella te ama mucho, y necesita que seas más tierno con ella, que le digas que la amas y la abraces fuerte sin motivo alguno— le hablo desde mi perspectiva de hija que creció anhelando que su padre la amara, sé que lo hacía pero el vacío que hay en mí corazón nadie lo puede llenar sólo él y ya no está.

— Mi padre murió cuando era adolescente— le cuento —y lo echo de menos todos los días— el me mira y por primera vez libero una lágrima a mí padre —él no era cómo tú, me amaba pero no estaba conmigo, siempre tendré el vacío de su cariño y su ausencia hace crecer ese espacio, aferrarte a tu hija y demuestra que la amas, si ella no tendrá que intentar llenar ese vacío con personas equivocadas.

— Siento mucho lo de tú padre— me dice.

— Mi bebé también crecerá sin un padre y no sabes todo lo que pienso hacer para llenar ese lugar— le digo y sus ojos se agrandan.

— Creí qué….— no lo dejo terminar.

— Seré mamá soltera, la historia del padre de mí hijo es larga y complicada— sonrío amargamente recordando a Nikolas, hace más de un mes que no se nada él espero que esté bien.

—Eres una excelente madre Anika— me toma de las manos —tu bebé es muy especial, cuando nazca y crezca sé que no tendrá ningún vacío por llenar— me dice y siento tan realistas sus palabras que las creo en lo más profundo de mi corazón.

— Estas son entradas para el teatro, mi amigo Cristian se representará en una obra de ópera— le entrego dos boletas —puedes llevar a Lissy y pasar un momento con ella— le digo.

—Gracias Anika.

— Y también estoy escribiendo el cuento— le informo

— Vaya, eso es una buena noticia, cuando te sientas segura, me lo entregas para leer la continuación— me dice terminando de tomar su café.