Secretos de Lobos. romance Capítulo 40

Narrador.

Kasul volvió al mismo punto del bosque en donde había estado recientemente con Charlotte y voceo con voz gutural: —Aparece príncipe maldito— el vampiro salió de la nada mientras reía y caminaba con suma elegancia.

—Te has enamorado de mí, perrito, que lástima, detesto las pulgas—, le habló burlón y mostrándose asqueado el vampiro llamado Ardat mirando con altivez a Kadul.

—No te creas importante sanguijuela, si volví aquí es para saber que te traes, dime cuál es tu plan, me causa intriga saber por qué no has drenado el cuerpo de Charlotte, sé que no podía ser capaz de detenerte si ese era tu propósito y que haces en este territorio— le preguntó Kasul con demasiado interés.

—Pues déjame decirte que estás perdiendo tu tiempo, no te diré nada, lo único que puedo decirte es que no hago tratos con perdedores; los demonios apostaron al lobo perdedor, eres solo una copia barata del alfa—, Ardat chasqueo la lengua, — que pena, quieres ser como tu hermano, pero nunca lograrás hacerlo—, un gruñido por parte de Kasul se escuchó y las carcajadas de Ardat fueron más sonoras— te faltó preguntarme por qué no deje que marcaras a la humana, — Kasul lo miro resoplando, — sí perrito patético cree un lazo con la humana, me metí en su cabeza—, luego de decir esto dejó a Kasul mucho más confundido, y todo lo que recibía de ese pálido eran carcajadas y más carcajadas que a él le pareció exasperante.

—Que irónico de todo esto lo que entiendo es que admiras a Karim, tú, un vampiro—, Kasul se echó a reír gracioso y burlón a la vez, — si tu padre el rey vampiro supiera lo bondadoso que es su hijo le daría vergüenza, anda cuidando a la humana de mi hermano ¡qué tierno!, pero déjame aclararte que mi plan no es tomar a su humana de manera violenta, lo que busco es que ella solita se entregue a mí, así mi querido hermano sentirá más rabia—, se miraban sin apartar cada uno su mirada del otro, se retaban mutuamente, a la vez que Kasul se recriminaba mentalmente el haber dejado que Charlotte lo engañara, ya que si el vampiro le advirtió entonces ella sabe que no es Karim.

—Un ser tan lastimoso como tú, nunca entenderá la intención de alguien como yo—, Kasul dejó salir sus garras y sus rasgos de lobos se estaban haciendo visibles.

—Me piensas imbécil, eso quieres decir que mi inteligencia es inferior a la tuya, maldita sanguijuela— rugió Kasul descontrolado soltando varios gruñidos.

—Qué bueno que lo has comprendido— le respondió muy calmado sin alarmarle que Kasul, estaba a medio transformar y es que claro, Kasul no es oponente para él y sabía que la duda de ese lobo es saber por qué no mordió a Charlotte o porque de paso no la asesinó, siendo el reino vampiro enemigo del rey lobo.

Un aullido salió de Morán, el lobo de Kasul cuando terminó la fase de la transformación y se fue encima de su adversario, tirando a arrancar su cabeza con sus fauces, pero, el vampiro que es flexible evadió su mordida y clavó sus largas uñas en un costado de su cuerpo haciendo que Karim que aún seguía en la manada en Canadá sintiera la sensación de dolor, aunque él puede matar a su propio hermano y morir en el proceso nadie más puede asesinarlo, es imposible, pero si crearle mucho dolor y hacerle daño como ahora. Karim respiró profundo y cerró los ojos sin emitir sonido, esperando que el dolor pasase, le daba rabia que Kasul siempre que estaba en desventaja lo hacía percibir su dolor; sin embargo, el bloqueo su conexión con su hermano para dejar que él sintiera todo por sí solo.

—Sé que no te puedo matar, pero te enseñaré a ser un perro más obediente— expresó Ardat retorciendo sus uñas afiladas dentro de las costillas de Morán y luego lo lanzó contra un árbol frondoso, haciendo que con el impacto el mismo se partiese a la mitad.

Los quejidos lastimosos del lobo retumbaron en el bosque, aunque sanaba seguido igual dolía y más dolía porque no podía compartir el dolor con su hermano, pero a pesar de verse perdido esta vez no corrió, sino que se levantó volviendo a gruñir, mientras se lamía por momentos el costado. La herida iba cerrando, a medida que él acechaba a su oponente, caminando sigiloso de un lado a otro, mostrando sus fauces llenas de una espuma, con sus largos colmillos, dispuesto a arrancar un pedazo de esa carne fría.

—Eres masoquista perro—, se agachó a tronar los dedos cómo se llama a un cachorrito, sabiendo que eso para un lobo es una ofensa, entonces en medio de sus juegos burlones se descuidó y Moran corrió a él mordiendo su brazo derecho, tirando de su piel, provocando que el vampiro dejara ver sus ojos rojos, y sus colmillos dejaran saber que ahora sí está realmente enfadado.

Dos golpes secos en el cuerpo del lobo hicieron crujir sus huesos y nuevamente fue lanzado lejos, pero esta vez contra el suelo, logrando hacer una zanja.

#Vamonos Moran# pidió Kasul y el lobo se levantó mirando con recelo al vampiro y sin dejar de verlo se dio la vuelta, empezando a correr al otro extremo del bosque, donde le entregó el control de su cuerpo a su humano, quien abrió un portal al inframundo.

Narra Charlotte.

Si yo estoy quedando loca, estas personas son más lunáticos que yo, ahora no solo me controla Karim, sino que también el supuesto padre de él, y encima descubro que en ese bosque hay demasiado misterio: un hombre que se parece a Karim que aún me cuesta creer que no sea él me salva de un desconocido que me habla en la cabeza y que me dijo un sin fin de estupideces como comerme y no matarme, pero a la vez, fue su voz extraña la que me salva.

—Tal vez estoy tan confundida que creo que mi cerebro me juega una broma, las esposas locas tienen razón y esto ya acabó con el poco juicio que tenía— dije hablando hacia paredes mirando el retrato de la primera esposa de Karim— me molesta ver ese cuadro.

“Si sigues hablando sola, creerán que estás loca” me sobresalte cuando volvió a hablar esa voz, que si antes me parecía hermosa ahora me parece irritante.

—Oye, eso es molesto, deja de hablar en mi cabeza— grité mirando para los lados y salí a la terraza, para mirar al bosque, a ver si lo veía.

“Piensas que para mí no es fastidioso escuchar los lamentos de una mujer tonta como tú, te dije que te voy a comer, me daré un banquete con tu sangre, pero primero debes cumplir con tu propósito”

Unos toques suaves en la puerta me hicieron dejar de pelear conmigo misma, o con lo que sea que signifique esto y cuando me acerqué dije.

—No ves que estoy encerrada.

—Soy Nazia, Charlotte, he venido para ver si estás bien—, me quedé sin habla, ahora esta chica me estaba tratando como si fuéramos amigas.

—Estoy aburrida y tengo hambre.

—Abriré la puerta, pero debes quedarte dentro, por favor o si no me traerás problemas con nuestro suegro—, cuando abrió tenía una bandeja en las manos, con comida y me la entregó—, me permitió traer comida, pero eres tan intensa que sentí miedo a que salieras corriendo en cuanto abriera— me reí, parece que el suegro me tiene pavor.

—Es…., — no termine porque Nazia me hizo una señal de que guardara silencio, cuando me pasó junto con la bandeja mi teléfono.

—Dejarás de estar aburrida, nos vemos—, me mostró una sonrisa a medida que cerraba la puerta.

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