Secretos de Lobos. romance Capítulo 46

Narrador.

Charlotte emitió un pequeño grito y Karim que estaba profundamente dormido, despertó sentándose de golpe y atrayéndola de manera protectora, no sabía que estaba sucediendo, pero su primer movimiento era cuidar de ella, entonces cuando Zilo se levantó Karim quedó sin aliento, su lobo había salido de él.

#Que…, # vio que podía usar el link, pero no entendía nada, ya que era la primera vez que sucedía algo así.

#Calma humano, yo también estaba igual que tú de asombrado, parece que mientras descansa puedo salir# aún Karim no daba crédito a lo que estaba sucediendo y Charlotte no paraba de temblar, pues creyó que ese lobo era parte de Karim y ahora lo ve a ambos separados uno del otro, eso la hace sentir miedo, y más porque recuerda como ese lobo mordió al otro.

—Charlotte, puedes tocarlo, él no te hará daño.

—Olvidaste los golpes que le di, viene a vengarse— respondió ella tratando de acurrucarse más en el cuerpo de Karim, mientras Zilo se acercaba buscando el cariño de su humana, pero ella huía de él por miedo y Zilo lloriqueaba, provocando que Karim sintiera un dolor insoportable en el pecho, pues es parte suya, a pesar de que ahora puedan dividirse, aunque no sabe cómo o por qué lo hacen, sin embargo, no deja de ser su mitad, su parte animal.

—Deja de pensar en eso, solo tócalo, él no te hará nada, confía en mí, quiere que le des cariño, solamente eso busca, hazlo, por favor— rogó el cómo si su vida dependiera de eso y le animó a extender la mano, empezando a tocar el pelaje negro brilloso de la cara.

—Me haces cosquillas— le dijo ella al lobo ya estando más en confianza, mientras el lobo le pasaba la gran lengua por la mano provocando que ella riera.

Charlotte se fue apartando de Karim y acercándose más a Zilo. — Ya no eres tan aterrador— volvió a hablarle, acariciándole el morro, sintiendo la respiración caliente del animal y Zilo se aproximó tanto que ella abrazó parte de él, ya que es demasiado grande, pero igual el lobo ronroneo, de manera hermosa y sin esperarlo él desapareció.

—¿A dónde fue? — se volteó ella a mirar a Karim— viste eso, ha desaparecido sin más.

#Que ha sido eso Zilo#

#Dile lo que somos#

—Ven, vamos a dormir— él extendió una mano.

—Pero…, — ella no sabía qué decir, había sucedido algo mágico frente a sus ojos.

—Pensé que eras un lobo, no entiendo—, se mostraba desconcertada.

—¿Te gustaría que lo fuera?

—Si, me encantan las cosas desconocidas y sería genial vivir algo distinto a lo que se supone que será mi vida—, él se quedó viéndola, sin saber cómo sentirse, si asombrado, porque no todos piensan como ella o si entristecer porque ahora al correrse en su interior acorta el tiempo para buscar una solución y salvarla.

— Ya veo, dame tiempo para poder decirte todo, solo intento protegerte; ahora vamos a dormir.

—No tengo sueño y ya amaneció—, Charlotte hizo un puchero hermoso.

—Pero es temprano y quiero dormir, quiero disfrutar del sueño, no sabe cuánto me cuesta hacerlo—, ella acomodó la cabeza en su pecho y con la yema de su dedo trazaba la runa que le abarca el pecho como un tatuaje.

—Debiste tatuarte mi nombre, y no esto, tan raro—, él aplastó los labios para no terminar en carcajadas. — Me dirás el propósito de esa vieja aquí.

—Ella es una amiga que vino a visitarme, pero no es mi mujer o amante, como lo quieras poner.

—Mejor así porque si no juro que me iría a Filadelfia—, lo miró a los ojos, como es costumbre, perdiéndose en esa mirada gris con destellos verdes.

—No podrías, — él la subió completa sobre su cuerpo, —no te dejaría—, la sola idea de verse sin ella lo abrumó.

—Sí que puedo, pero no me iré hasta descifrar tus secretos, no creas que aún no siento que eres misterioso—, él sonrió mostrando esa carrera de dientes perfectos.

—Sí que eres entrometida, pero te contaré una historia—, como niña emocionada, ella afirmó, — te propusiste no dejarme dormir—, Charlotte se rió quedamente, pero sin bajarse de él, más bien puso sus piernas a cada lado de la cadera de Karim, sintiendo que ese hombre nunca está satisfecho, esa erección no baja en ningún momento.

—Existe una historia de dos niños que comparten una misma alma y que nacieron por augurio de la luna, ellos dos no son humanos, sino que son seres especiales, con poderes únicos, pero uno de esos niños, tenía más poder que otro, ya que nació con una responsabilidad de ser el rey de una especie; sin embargo, aquello no era para nada fácil o bonito como lo demás creían, ese niño sufría solo, viendo como todos los niños jugaban libremente sin tener preocupación, o sin tener que ser clasificado, para ese niño era muy triste que otros niños de su edad hasta se limitarán hablarle, solo por temor a que era demasiado poderoso y que los adultos le decían que debían de respetar. Los años pasaron y esos dos niños que eran inseparables, con una conexión única, se alejaron el uno del otro al perder a toda su familia a manos de unos seres oscuros que asesinan por diversión; sin embargo, el hermano que no tiene mucho poder culpó a su otro hermano, de ser responsable de esas muertes, al afirmar que él con tan maravilloso don habría evitado las muertes de sus padres y hermanos—, Charlotte lo interrumpió.

—¡Qué injusto!, también son su familia, nadie querría que le asesinen a toda su familia, ese hermano es cruel— manifestó con molestia.

—Más tarde los mismos seres que acabaron con la familia de esos dos hermanos, regresaron para seguir haciendo daño, pero no sabían cómo, ya que ellos no pueden morir a manos de otras personas; no obstante, pueden asesinarse entre sí, — ella abrió los ojos muy grandes pareciéndole graciosa a Karim.

—Ese detalle es retorcido— él quiso reír, pero mordió su labio para controlar las carcajadas que amenazaban con salir.

—El más poderoso, puede asesinar al débil, y al hacerlo él también muere, entonces estos, seres oscuros y perversos, optaron por envenenar el alma del hermano débil, diciéndole que es injusto que él sea el bueno para nada, que solo vive a la sombra del otro, incitándolo a provocar al rey, usando a ese hermano como una pieza de ajedrez en un juego—, Charlotte se sentó en la cama, y miro a Karim con interés, le estaba gustando muchísimo la historia, incluso la estaba haciendo enojar.

—Será imbécil ese hermano, es que no se da cuenta de que lo están usando, personas tan tontas como él me dan ganas de darle unos madrazos para que recapaciten, si no toman juicio mueren, pero algo hacen—, Karim no aguantó más y estalló en carcajadas, aunque recordar su pasado siempre le pareció triste ahora viendo como su humana quería pelear con Kasul por idiota le causaba risas.

—Sigue para que no se te olvide— lo animó desesperada, esta era la primera vez que ella y Karim hablaban más. En cambio, Karim buscaba en su mente las palabras correctas para no quedar en evidencia, suponiendo que no era momento de que Charlotte supiera que él es ese rey.

—Para resumir la historia, el hermano se fue con los enemigos, y cuando el rey se casó, siendo feliz con su esposa a los pocos días, su hermano la asesinó, a pesar de que debía quererla; no amarla en sí, pero si al menos sentir afecto por ella, ya que era la pareja de su hermano, con quien compartía algunas sensaciones—, Charlotte lo detuvo levantando una mano.

—Para, para, me estás diciendo que, si uno de estos dos hermanos tiene sexo, el otro lo disfruta—, Karim se pasó la mano por el rostro.

—No es de extrañar que me hagas esa pregunta, tú no tienes comparación—, él sonrió a medida que negaba con la cabeza—, no es justamente como lo piensas, aunque si siente excitación, al igual que la preocupación, el dolor, aunque no en gran cantidad, pero se comparte, claro está si el más fuerte lo acepta o se descuida y deja que su escudo se debilite.

—Ya veo, por esa razón has sentido lo del beso, — Karim abrió los ojos de golpe, — me voy a bañar, — se levantó antes de que él pudiera decir una palabra para negarlo— me ha fascinado tu historia, ahora hay que escuchar el otro lado de la campana, cuáles son las razones del idiota hermano misterioso.

—Charlotte, harás que se me caigan los pelos de frustración—, le gritó un Karim preocupado, no creyó que ella fuera a interpretar que él es el dueño de esa historia. Sin embargo, ella bromeaba con él, claro que, con muchas dudas, uniendo muchos cabos sueltos en su cabeza, porque, aunque no conoce esa parte poderosa, siente que hay mucha semejanza, empezando por el retrato de la mujer en su aposento del cual no ha preguntado nada y ahora la aparición de ese hermano que parece ser enemigo.

—Un lobo sin pelo debe ser algo feo.

«Supongo que estoy a punto de descubrir todos tus secretos Karim» Pensó mientras sonreía ladina.

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