—¿Entonces ahora son novios?
—Lo sé, somos muy complicados.
—Ufff... Ya me había dado cuenta de eso —hice una mueca y rió—. Bueno, al menos parece que ahora no me odia... tanto.
—Dice que intentará llevarse bien contigo, y creo que de verdad lo está intentando —pasé mis manos por su cabello para peinarlo un poco
—¿Y por qué no le caigo bien?
—Supongo que no le caes tan bien porque cree que yo te gusto —me encogí de hombros. Ladeó un poco su cabeza—. Es una estupidez, lo sé.
—¿Por qué sería una estupidez que me gustases? —alzó una ceja. Me alejé de él con una sonrisa nerviosa—. Yo no lo encuentro raro. Eres linda, buena persona y tienes buen sentido del humor. ¿De verdad crees que sería algo tan estúpido?
—O sea no, no es una estupidez. Sólo se me hace raro porque tú nunca me lo has dicho, y nosotros nos tenemos bastante confianza. Entonces sería extraño.
—Suelo no decirles a las chicas que me gustan que... pues eso, que me gustan —sonó bastante tranquilo. ¿Estaba admitiendo que le gusto? Dios, no sé qué cara puse, pero ahora estaba riendo a carcajadas frente a mí—. No te preocupes, yo no haría nada sabiendo que tienes novio. No pienses que debes alejarte de mí, respeto tu relación y tampoco quiero que se vuelva incómodo esto; estar los dos solos.
—Chyler me lo dijo un millón de veces —murmuré—. ¿En serio todos se habían dado cuenta menos yo?
—Parece que sí —chasqueó su lengua. Acercó su mano a mi cabeza y me despeinó—. No te preocupes, no soy de esos que sufren por amor.
—Me alegra saber eso, no me gustaría hacerte sufrir.
—No pasa nada, tú tranquila —llevó sus manos al borde de su polera y se la quitó en un segundo—. ¿Ya es tiempo de las fotos con el torso desnudo?
—No me puedo negar a eso, Joshua —bromeé. Sonrió y se fue a la pared que habíamos elegido para sacar las fotos. Era la que estaba en mejores condiciones, además a la que le llegaba mejor luz—. ¿Puedes poner música? Tal vez así se me hace más fácil.
—De hecho, yo tengo que tener música en cada una de mis sesiones de fotos.
¿Qué canción quieres?
—Me gustaría Imagination de Foster The People.
—Buena elección.
Me alegraba no sentirme incómoda luego de que me haya dicho que le gusto. No me gustaría perder la amistad que tengo con Joshua, es mi único amigo de verdad.
Bueno, Andreus también podría serlo, pero no lo conozco demasiado
—¿Crees que Mikkel venga hoy?
—No, ya aprendió que no tiene que volver a venir sin ser invitado, además, hoy está en una reunión con mi padre y otras personas que no tengo idea de quiénes son.
—Me alegro, dudo que podría concentrarme si estuviera acá. Se reiría de mí, mis poses son asquerosas.
—Si lo fueran te lo diría, pero a mí me gustan —limpié el lente de la cámara
—¿De dónde la sacaste? —miró el aparato que tenía entre mis manos.
—Hace un tiempo mi hermana se creía fotógrafa, le pidió una cámara a mis padres y la uso dos veces, así que ahora es mía.
—¿Ahora tú te crees fotógrafa?
—Pues sí, todo sea por ayudarte.
Tal vez soy un poco exagerada, pero de verdad parecía una fotógrafa profesional. Estaba orgullosa de mi trabajo, pero debo decir que sin duda tengo a un muy buen modelo que es quien hace toda la magia.
Después de cincuenta fotos (la mayoría muy buenas), decidimos que era momento de que yo sea su acompañante. Claro, el book de fotos es de él, pero creo que le será beneficioso que tenga algunas fotos conmigo.
Conozco este mundo, sé cómo son las marcas y estoy segura de que le dará puntos extras ser mi amigo y tener fotos junto a mí.
—Creo que podríamos hacer algo sensual.
¿Te incomoda que arriba me quede sólo con el blazer?
—Sí, me lo saqué por un momento —cambié la foto sintiendo como hacía más fuerte su agarre en mi cintura—. Auch.
—¿Era necesario que pusiera su mano cerca de tus pechos? —reí a carcajadas. Dejé la cámara nuevamente en su bolso y me giré hacia él—. No es gracioso.
—Si lo es —susurré mientras me acercaba a su cuello para dejar besos húmedos en él.
—Alyssa... —gruñó.
—¿Mmh? —atrapé un poco de su piel con mis dientes mientras jugaba con los botones de su pantalón.
—No lograrás hacer que me olvide de lo que estábamos hablando.
—Soy modelo, Mikkel. Me he sacado y me sacaré cientos de fotos con chicos que tal vez pondrán su mano cerca de mis pechos.
—No es lo mismo, a Joshua le gustas, a los modelos con los que trabajas no —segundos después de decir eso se separó de mí—. Bueno, espero que no.
—¿Y qué? Eres el único al que quiero, el único que puede tocarme y disfrutar de eso —desabroché su pantalón y metí mi mano para tocar su pene sobre el calzoncillo—. Tú quisiste ser novio de una modelo, así que tendrás que acostumbrarte, cariño —saqué su pene ya erecto y lo rodeé con mi mano para masturbarlo. Sonreí al ver su cara de satisfacción.
—Si harás esto cada vez que estemos hablando... vamos a hablar mucho entonces.
Reí mientras me ponía de rodillas entremedio de sus piernas. Acerqué mi lengua a su glande y lo lamí haciendo círculos para después ingresarlo por completo dentro de mi boca. Mikkel puso su mano en mi cabeza para hacer más rápido mi movimiento.
—Señor Hummel—Kasia llamó a la puerta dando unos golpecitos.
Mikkel no dijo nada. Siguió moviendo mi cabeza son su mano mientras jadeaba.
—Shay entró a la casa mientras yo salía a botar la basura y ahora no puedo sacarla. Dice que tienen que seguir hablando de eso. No sé a qué se refiere, me pidió que se lo dijera así.
Saqué su pene de mi boca y lo miré con el ceño fruncido.
—¿Qué es “eso”?
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