La mimada del Alfa romance Capítulo 11

Xander Cohen

—Alfa necesitamos hablar, —dice Parker por el enlace provocando que deje de mirar a mi pequeña luna para verlo a él parado en la puerta que da acceso al comedor.

—Espérame en el estudio, —le respondo para cerrar el enlace y observar como él se va.

—Nana ¿te puedes que dar con Camila un momento? —pregunto a lo que ella asiente, ya no queda nadie en el comedor, mis padres se fue a su despacho con los invitados y Mimy se retiró a la universidad, así que en la mansión solo está Rosa y Parker este último pasa más tiempo aquí que en su casa porque es mi beta y mate de mi hermana.

—No te preocupes mi niño, te puedes ir y durar el tiempo que sea necesario, cuidare muy bien a la pequeña, —anuncia tendiéndole la mano a Camila.

—De eso no tengo duda, —murmuro para dejar un beso en la frente de mi pequeña y dirigirme al estudio ya a que el despacho está ocupado por mi padre.

Entro al estudio y encuentro a Parker con un vaso de lo que supongo es Whiskey sentado en la silla observando fijamente los papeles, tomó asiento y arqueo una de mis cejas en espera de respuesta.

—Si quieres te puedes servirte algo, —le digo con sarcasmo este suelta un bufido y se levanta de su asiento para tomar otro vaso y servirme un poco—No quiero, —añado a lo que él me mira y niega.

—Créeme lo necesitarás, —comenta, me sirve para luego tomar asiento y pasarme el vaso.

—¿Y bien? ¿Qué has encontrado? —Pregunto yendo directo al grano porque quiero estar con mi luna y llevarla a comprar le ropa y todo lo que necesite.

—Pues ahí está todo lo que necesitas saber, —anuncia señalando el expediente, lo tomó y lo primero que ven mis ojos es el nombre tachado.

Nombre: Margare Johnson

Edad: 37

Sexo: F

Nacionalidad: Española

Tipo de sangre: A

Esposo: Tomás Albora

Hijos: Camila Albora Johnson

Más abajo se encuentra la fecha de nacimiento de Camila 11/noviembre/2013 eso quiere decir que mi pequeña cumplirá sus seis años en cuatro días y la gran sorpresa es que mi cumpleaños es cinco día después del de ella.

—No hay nada fuera de lo normal, —le digo levantado una de mis cejas. —Solo que mi luna cumple años cinco días antes que yo, —añado a lo que él me entrega otra carpeta que hasta ahora no había visto.

La abro y leo lo siguiente:

Tomás Albora mejor conocido como Máximo Rodríguez dueño de las empresas importadora "CanTun".

—Joder, —gruño y tomó un trago.

La maldita empresa del padre de mi luna es la misma que trabaja con los malditos cazadores que han eliminado a cinco manadas completas.

—Así es hermano, —dice a lo que paso mi mano por mi cabello y sigo leyendo.

—Carlos por la diosa, —murmuro entrando al Jeep.

—También pedí que vinieran algunos escoltas, —anuncia cuando está sentado en el asiento del piloto.

Asiento.

—Bien, ya me imagino que nana te abra dicho a donde voy, —curioseo a lo que este asiente y pone el auto en marcha, mi luna saca su rostro de mi cuello y me observa fijamente.

—¿Qué pasa? —Le pregunto.

—Tus ojos cambian de colol, —murmura a lo que frunzo el ceño.

—¿Así? ¿A qué color cambian? —Le pregunto.

—Están lojo y anoche azul, —señala a lo que me sorprendo, no me había dado cuenta de que mis ojos ahora mismo estaban rojos, eso solo pasaba cuando estoy enojado.

También cuando el enojo es muy fuerte se ponen totalmente negros y se colocan rojo cuando mi lobo está conectado conmigo.

—Eres muy observadora, —murmuro tocando su respingona nariz, respiro profundo y trato de calmarme, cierro los ojos y siento un pequeño escozor lo que me avisa que ya han cambiado a su color habitual—Listo, —añado abriéndolo, Camila abre los suyos muy sorprendida.

—Genial… tienes podeles, —Chilla a lo que frunzo el ceño.

—No, claro que no, —le digo a lo que la pequeña asiente «Por la diosa este será el viaje más loco que haré hasta el centro comercial» pienso, viendo venir la batalla de tú me dices y yo te digo.

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